GANTE, BÉLGICA (AFP).– La Gran Bretaña de Andy Murray, que no inscribe su nombre en la Copa Davis desde 1936, intentará conquistar su segunda Ensaladera de Plata ante una Bélgica que juega como local y que está ante una ocasión histórica, desde hoy en Gante, en una final con grandes medidas de seguridad por la alerta contra atentados.
Bélgica nunca ha ganado esta competición y el país no había alcanzado la final desde hace 111 años, cuando perdieron en el último duelo ante los británicos.
Poco acostumbrados a ser protagonistas en la Davis, los hombres de Johan Van Herck se han propuesto no dejar pasar esta oportunidad de oro.
En la primera ronda, los belgas superaron en la primera ronda a Suiza, defensora del título pero que no contó en aquella eliminatoria con sus dos líderes, Roger Federer y Stan Wawrinka.
Luego, también en su casa, dominaron a Canadá, debilitada también por la ausencia de sus mejores hombres, antes de superar a Argentina en una semifinal en Bruselas.
Desde hoy al domingo, los belgas tendrán de nuevo la ventaja de ser locales, algo siempre valioso en una competición como la Copa Davis. Para contrarrestar las cualidades de los británicos en los saques han elegido jugar en tierra batida.
La misión para Bélgica será poder neutralizar a Andy Murray. Murray tiene confianza en el éxito de los suyos. Hace dos semanas en París-Bercy, Murray sólo perdió un juego ante el número uno belga, David Goffin (16º de la ATP).
Goffin, principal esperanza de los locales, es el referente de un equipo que completan Steve Darcis (84º del mundo), Ruben Bemelmans (108º) y Kimmer Coppejans (128º).
Alerta contra atentados
Los partidos de la final se disputarán ante 13.000 espectadores y en un estado de ánimo algo tenso.
Desde hoy, el gobierno belga fijó en el máximo su nivel de alerta en la región de Bruselas por una amenaza de atentado “seria e inminente”.
La final tiene lugar en Gante, a 55 kilómetros de Bruselas y en otra región, por lo que no se ve afectada por ese nivel máximo y estricto que vive la capital, pero en cualquier caso habrá grandes medidas de seguridad.
En colaboración con la Federación Internacional de Tenis (ITF), la Federación Belga ha adoptado una serie de medidas para garantizar la seguridad. Por ejemplo, las bolsas y mochilas no estarán autorizadas en el recinto.
El acceso al recinto donde se encuentra el pabellón, el Flanders Expo, sólo estará permitido para los aficionados con entrada.