BUENOS AIRES (NA).– Barcelona vapuleó a River por 3 a 0 con un tanto de Lionel Messi y un doblete de Luis Suárez, ayer, en la ciudad japonesa de Yokohama, y se consagró campeón del Mundial de Clubes.
El futbolista argentino abrió la cuenta a los 36 minutos de la primera parte tras una buena jugada colectiva entre él, Jordi Alba y Neymar mientras que a los 3 y 21 de la segunda etapa el uruguayo selló la goleada.
El primer tiempo fue entretenido con un River que comenzó esperando al Barcelona y a los 5 minutos tuvo la chance de abrir el marcador cuando Tabaré Viudez envió un remate desde fuera del área por la derecha y Gerard Piqué llegó con lo justo para sacar el balón de cabeza en la línea al córner.
Con el correr de los minutos el equipo español empezó a tener el dominio y a los 10 pudo haber marcado la primera conquista cuando Andrés Iniesta desde fuera del área, por el medio, le dio un pase perfecto a Lionel Messi, quien recibió en el interior de la misma y remató, pero un atento Marcelo Barovero le tapó el tiro quedándose con el balón sobre su palo izquierdo.
Sobre los 23 minutos Barcelona tuvo otra posibilidad a través de un disparo de Dani Alves desde la derecha que controló Barovero mientras que a los 33 el arquero de River despejó al córner un tiro libre desde la derecha ejecutado por Messi.
La impaciencia de River empezó a hacerse notar, ya que no lograba recuperar la pelota ante un rival que con su tranquilidad habitual logró ponerse en ventaja a los 36 minutos.
Messi arrancó la jugada por el medio, le dio un pase a Jordi Alba quien envió un centro para Neymar, el brasileño habilitó a Messi, que entre Maidana y Álvarez Balanta, definió al palo izquierdo.
En el segundo tiempo, Barcelona fue el claro dominador del juego comandado por un Neymar impecable que jugó e hizo jugar a sus compañeros mientras que además apareció Luis Suárez que con un doblete le dio aún más tranquilidad al conjunto español.
A los 3 minutos el equipo de Luis Enrique pudo aumentar la cuenta por medio de un contraataque perfecto. Sergio Busquets cortó un mal pase de Carlos Sánchez, la pelota la recibió Luis Suárez por el medio encaró hacia el área de Barovero, ingresó y definió al medio del arco.
Seis minutos más tarde, Messi desde dentro del área por la derecha, envió un tiro que Sánchez sacó en la línea y Barovero terminó despejando mientras mientras que a los 11 el argentino y Neymar armaron una jugada de lujo.
El brasileño se apoderó de la pelota, le dio un buen pase a Messi, quien remató en el área y la pelota se fue cerca del palo izquierdo de Barovero mientras que a los 21 Neymar mandó un centro desde la izquierda y Suárez, con un cabezazo perfecto al ángulo derecho de Barovero, puso el 3 a 0.
Las únicas dos jugadas claras de River fueron a los 31 minutos, cuando Lucas Alario cabeceó desde dentro del área y el arquero Claudio Bravo despejó al córner, y a los 38, cuando Gonzalo Martínez disparó desde fuera del área, Bravo tocó la pelota y esta terminó rebotando en el palo izquierdo.
Gallardo analizó la derrota
El entrenador de River, Marcelo Gallardo, confió ayer que su equipo no pudo “sostener el partido” que había proyectado, pero remarcó los primeros 40 minutos de juego, donde pudo hacer sentir “incómodo” al conjunto español.
“Teníamos un plan de juego, lo pudimos llevar a cabo durante casi 40 minutos. Ahí estuvimos bien, hicimos sentir incómodo a un gran equipo, pero después del gol nos desbordamos un poquito, porque la idea era sostenerlo porque ellos iban a bajar”, analizó Gallardo.
También, el Muñeco explicó el por qué del doble cambio que incluyó en el inicio del segundo tiempo, con el ingreso de Luis González y Gonzalo “Pity” Martínez.
“Buscamos un mejor control de pelota con Lucho, darle un poco más de velocidad al ataque con Martínez para que acompañe a Tabaré, que era el jugador más en forma que teníamos”, sostuvo.
Gallardo lamentó no haber podido “sostener el partido que queríamos hacer”, porque, en la previa, habían previsto llegar a los minutos finales “con chances” y no que definieran la historia “con algunas situaciones favorables para ellos”.
“El balance que tengo que hacer, más allá de la tristeza y la amargura por perder, es agradecerle a los jugadores por el gran esfuerzo, porque no llegábamos en nuestro mejor momento futbolístico y esa es mi amargura”, indicó.