44 velas por la memoria

44 velas para mantener viva la memoria de la tripulación del ARA San Juan. Están en poder de vecinos de Río Grande que la recibieron de manos de Pablo Fernández y Rafael Enríquez, hermanos de dos tripulantes desaparecidos. Cada 15 de noviembre serán encendidas para mantener viva la memoria de los 44 héroes que custodian el Mar Argentino.

Las velas que fueron repartidas al pie de una figura del submarino.

RIO GRANDE.- Pablo Fernández y Rafael Enríquez, hermanos de dos tripulantes desaparecidos en el hundimiento del submarino ARA San Juan, entregaron a vecinos de ésta ciudad 44 velas con el nombre de cada uno de los héroes, para que cada 15 de noviembre sea encendida y se mantenga firma la memoria de todos ellos.
La entrega de las velas fue en una ceremonia que se realizó el pasado viernes en el Monumento a los Caídos en Malvinas, donde se congregó la gente para rendir el homenaje desde ésta ciudad, por cuyos mares circundó el submarino hasta que el 15 de noviembre de 2017 se perdiera todo contacto en la zona cercada al Golfo de San Jorge.
En el acto hubo un responso religioso que estuvo a cargo del padre Iván Bressán, quien pidió a Dios que “el testimonio de los 44 héroes sirva para reconocer la figura y la actitud de tantos hombres y mujeres que en las fuerzas armadas y de seguridad ofrendan sus vidas para hacer Patria, para servir al país”.

Pablo Fernández y Rafael Enríquez, hermanos de dos tripulantes del ARA San Juan.

Asimismo el sacerdote oró a Dios para que los familiares y demás seres queridos “puedan encontrar el alivio a su sufrimiento y el eterno descanso de sus almas”.

Recuerdo
Pablo Fernández, hermano gemelo del tripulante del ARA San Juan, Suboficial Segundo Daniel Fernández, brindó palabras alusivas y sostuvo que “lo importante es no olvidar. Esperamos saber realmente qué es lo que pasó; solo tenemos conjeturas e hipótesis y todavía no sabemos ciertamente qué ocurrió. Lo importante es mantenerlos vivos en el recuerdo de lo que hoy nos queda de ellos. Pese a ser una causa muy compleja, al no contar y palpar al submarino, pero sé que la justicia va a llegar a buen puerto y un día sabremos toda la verdad”.
Pablo recordó que aquel noviembre de 2017 fue a Ushuaia a despedir a su hermano Daniel. “Estuvimos todo un día con él, como nunca hablamos de muchas cosas que jamás nos dijimos, fue un día muy intenso en el que recuerdo cada detalle, tomamos mate, cenamos y nos despedimos. Mi señora observó que fue una despedida totalmente distinta, sin saber lo que pasaría después con el submarino”.

El héroe de guerra de Malvinas, Horacio Chávez, presente en la ceremonia.

Pablo agregó que “tenía un extraño presentimiento que no puedo racionalmente explicar, tal vez porque soy hermano gemelo de él; fue una despedida muy intensa, no nos habíamos visto por un par de meses ya que (Daniel) estaba en Mar del Plata. Me dijo: ‘Cuidame los nenes’, como si fuera la última vez”.
En tanto Rafael Enríquez, hermano del tripulante del ARA San Juan, Suboficial Segundo Marcelo Enríquez, habló del sentido de repartir las velas entre las personas que presenciaron la ceremonia.
“Le dimos una a cada uno de los que nos vinieron a acompañar, cada vela lleva el nombre de un tripulante y queremos que cada 15 de noviembre la enciendan en memoria de ellos, así los mantendremos vivos en nuestro recuerdo y en nuestros corazones”, dijo Rafael.

La entrega de las velas que quedan en poder de la gente para que sea encendida cada 15 de noviembre.