A pesar de las multas onerosas que deben afrontar, los casos de alcohol al volante no tienen freno en Río Grande. Ayer, en horas de la mañana, ocurrieron dos incidentes, uno de ellos con persecución policial incluida.RIO GRANDE.- La Policía tuvo que intervenir en dos casos de conductores totalmente ebrios, uno de los cuales chocó a un móvil policial en su persecución. El otro provocó un raid de daños en el barrio Danés, donde chocó una columna y cuatro autos estacionados a lo largo de varias cuadras.
El primero y más espectacular de estos hechos se desarrolló por las calles céntricas de la ciudad donde personal policial de la comisaría Primera se encontró con el rodado Volkswagen Gol Trend de color azul circulando en contramano sobre la calle Espora.
Allí se inició la persecución previo evitar que el Gol los colisionara cuando el conductor aceleró, intentando embestirlos.
La persecución se trasladó por diversas calles de la zona céntrica, cruzando el conductor semáforos en rojo y generando un riesgo importante en la vía pública.
Luego siguió por la zona del barrio AGP, colisionando en calle Pacheco al móvil Ford Focus, número 411, que se encontraba patrullando esa zona y ajeno a la persecución.
Tras esa embestida el conductor del Gol siguió hasta la rotonda llegando al puente Mosconi, donde producto de su estado no controló el vehículo y se despistó.
Allí Cristian Eduardo Riveros de 24 años fue detenido contravencionalmente y se pudo comprobar que al test de alcoholemia tenía 1,88 gr/l. El automóvil que conducía fue puesto a resguardo en el Corralón Municipal.
Raid de destrozos
El segundo casi se dio casi en simultáneo, pero en jurisdicción de la comisaría Segunda donde el protagonista de los destrozos fue Cristian Iván Cárcamo Vargas de 28 años al mando de un rodado Ford Fiesta de color negro, patente MZU 953, empezando con el impacto contra una columna del tendido eléctrico en el cruce de calles Roldán y Don Bosco.
Luego de esto continuó circulando e impactó, en Forgacs y pasaje San Juan a una camioneta Amarok, luego en Don Bosco al 1900 un Peugeot 208, y en Darwin al 1100 a una camioneta Cherry Tiggo y a un Chevrolet Celta.
Allí fue demorado el conductor, quien en la alcoholemia dio 1,61 positivo, siendo incautado su rodado por personal de Tránsito.
Los vecinos cuyos autos estacionados se vieron damnificados, fueron asesorados de las instancias judiciales a seguir contra este sujeto.