Concejales aprobaron el proyecto de ordenanza para aplicar la tolerancia cero en Río Grande

La autora del proyecto aprobado, Miriam Mora, al momento de fundamentarlo.

En base al proyecto de la concejal Miriam Mora, el Concejo dio luz verde a la medida de no tolerar graduación alguna en los test de alcoholemia a conductores. También se endureció la sanción a quienes se nieguen a “soplar la pipeta”.

RIO GRANDE.- El Concejo Deliberante aprobó el proyecto de ordenanza para la aplicación de la tolerancia cero en los controles de alcoholemia a conductores de automóviles de todo tipo y, además, endureció la infracción para aquellos automovilistas que se niegan a realizar el test.

Los concejales se inclinaron por aprobar el proyecto de la concejal Miriam Mora, asunto 253/17 del Frente para la Victoria; a pesar que el Departamento Ejecutivo había presentado el propio en ocasión de una jornada de concientización que se hizo con la asociación “Luchemos por la Vida”

El proyecto modifica el artículo 5° de la Ordenanza 1010, estableciendo de ahora en más que “queda prohibido conducir cualquier tipo de vehículos con tasa de alcoholemia superior a cero gramos por un mil centímetros cúbicos de sangre”.

En los fundamentos del asunto tratado se tuvo en cuenta que desde el Ejecutivo Municipal se informó que “se ha detectado un incremento del 35% los casos de secuestro por alcoholemia positiva”, ello a pesar que existe una ordenanza vigente que aplica altas multas en ese tipo de infracciones.

Junto con la ordenanza de tolerancia cero, el Concejo también modificó el artículo 84, del Anexo II de la Ordenanza 2859, quedando la nueva redacción de la siguiente manera: “Por negarse a someterse a la realización de la prueba de alcoholemia, multas de 5000 UP e inhabilitación para conducir todo tipo de vehículos por 120 días”.

Hasta esta modificación, los automovilistas que se negaban al control de alcoholemia tenían la posibilidad de pagar el mínimo de la multa, para sortear la infracción.

La fundamentación

Debemos readecuar la norma vigente, específicamente en lo relacionado a conducir vehículos en manifiesto estado o alteración psíquica, los efectos de alcohol en sangre o a la velocidad que no está permitida.

De acuerdo a la realidad actual, creemos conveniente realizar modificaciones a la norma original, con el objeto de disminuir el número de siniestros viales relacionados con el consumo de alcohol y de resguardar la seguridad individual y colectiva de nuestros ciudadanos, ya que se ha comprobado que la mínima ingesta de alcohol triplica el riesgo de sufrir un siniestro vial.

El alcohol es uno de los factores de riesgo que mayor incidencia tiene en los accidentes de tránsito y dentro del contexto de los errores de conducción, el alcohol casi siempre se encuentra asociado con la velocidad, el sueño y las distracciones.

Debemos ser sujetos activos y tomar una conducta de cambio, actitudes solidarias para con todos los usuarios del espacio común, dejando de justificar comportamientos inadecuados con los que se limitan derechos ajenos para satisfacer necesidades propias.