ROMA (AFP).– Pese a un mal arranque ante el Bologna, la Juventus dio la vuelta a la situación después del descanso, impulsada por la entrada de Douglas Costa, y terminó ganando 3-1, ayer en la 36º jornada, por lo que podría ser campeona matemáticamente hoy.
Una derrota del Nápoli en el campo del Torino brindará a la Juve un séptimo Scudetto consecutivo.
Con su victoria de ayer, el equipo de Massimiliano Allegri se puso con 7 puntos de ventaja provisionalmente sobre el Nápoli, que tiene tres partidos pendientes de disputa -un máximo de 9 puntos-, por lo que la Serie A empieza a tomar color bianconero.
Aunque el Nápoli consiga alargar el suspenso una jornada más, la Juventus tendría todavía dos partidos para sumar los tres puntos que le asegurarían terminar como campeona.
Ayer, la Juventus tuvo un susto en una mala primera parte en la que Simone Verdi adelantó de penal al Bologna en el minuto 30.
Antes del descanso, los turineses, sin el suspendido Miralem Pjanic, habían desperdiciado varias ocasiones, pero sin ofrecer muchos argumentos.
Todo cambió en la segunda mitad, después de que Blaise Matuidi fuera reemplazado por el brasileño Douglas Costa.
Gracias a su rapidez y a su motivación, la Juventus despertó. Empató en el 51 con un tanto en contra de Sebastian De Maio en un centro del colombiano Juan Cuadrado.
Douglas Costa destruyó luego la banda derecha de la defensa del Bologna para brindar dos asistencias perfectas para los siguientes goles de los locales, primero para el alemán Sami Khedira (63) y después para el argentino Paulo Dybala (68).
Hellas Verona, a la B
En el otro partido de ayer, el Milan recuperó provisionalmente la sexta plaza de la Serie A, que clasifica para la fase de grupos de la Europa League, al derrotar 4-1 al Hellas Verona, que quedó matemáticamente descendido a la segunda división.
A la espera de los otros partidos de esta 36ª jornada, el Milan supera en la tabla al Atalanta de Bérgamo (7º), que queda a 2 puntos de los rossoneri, antes de medirse al Lazio (4º), hoy.
El Milan se distancia además con seis unidades más que Fiorentina (8ª) y Sampdoria (9ª).
La sexta plaza sería garantía para el Milan de jugar la próxima edición de la Europa League desde la fase de grupos.
A la espera de la final de Copa, los hombres de Gennaro Gattuso cumplieron su misión ante los veroneses, gracias a los goles marcados por el turco Hakan Calhanoglu (minuto 10), Patrick Cutrone (32), Ignazio Abate (49) y Fabio Borini (89).
El único tanto del Hellas lo marcó, ya en el 84, el surcoreano Lee Seung-Woo.
Para el Hellas (19º), esta derrota supone la condena para bajar a la Serie B. Con 25 puntos a dos jornadas para el final, los veroneses ya no pueden alcanzar a la SPAL, el último equipo fuera del descenso, que tiene 32.
El Hellas Verona se convierte por lo tanto en el segundo equipo en bajar a segunda en Italia, después del Benevento.