Alberto Alonso, titular del Centro de Excombatientes Islas Malvinas de La Plata, que impulsó las denuncias en el ámbito de la Justicia federal, celebró el pedido de detención de militares que formuló el fiscal Marcelo Rapoport. “El material probatorio es contundente, porque están las descripciones de los hechos y todos los testigos, porque las torturas ocurrieron a la vista de todos los soldados”, aseguró Alonso.
RIO GRANDE.- El titular del Centro de Excombatientes ‘Islas Malvinas’ (CECIM) de La Plata, Buenos Aires, Alberto Alonso, celebró la decisión de la Justicia federal de solicitar la detención de 26 militares por las torturas a conscriptos durante el conflicto bélico de Malvinas.
En declaraciones a Radio Fueguina, Alonso -que encabezó la comitiva de excombatientes que hace más de una década se animó a denunciar los vejámenes- precisó que “la verdad que ha sido una gran noticia después de 11 años que venimos sosteniendo la causa y donde en los últimos años hubo un gran aporte de información gracias a la desclasificación de archivos”.
“Como siempre hemos dicho, acá hay una responsabilidad directa del Poder Judicial de la Nación porque hay víctimas que están reclamando justicia hace 36 años, con denuncias ni bien regresamos de Malvinas”, planteó y a su vez, manifestó: “Esperemos que con esto se avizore esa puerta y hoy está en manos del juez (Federico) Calvete tomar las decisiones que deba tomar. También hay un gran trabajo del fiscal Marcelo Rapoport porque ha sistematizado la información en este proceso, después de los dichos terribles de las víctimas que hablaron de torturas aberrantes”.
En ese sentido, consideró que “ahora tiene que decidir el juez, hay un excelente trabajo que se hizo desde el momento en que denunciamos y no tengo dudas que el material probatorio es contundente, porque están las descripciones de los hechos y todos los testigos, porque las torturas ocurrieron a la vista de todos los soldados compañeros de los torturados” y fue más allá al contar que “incluso la propia fuerza reconoce en los archivos desclasificados que cometió torturas y otros delitos de lesa humanidad. En 2007 se hicieron las primeras denuncias en Corrientes y la verdad, ya no se puede tapar el sol con las manos, esto no se puede esconder más”.
“Las secuelas que dejaron las torturas en los compañeros que volvieron de la guerra han sido terribles, con lesiones físicas y hasta suicidios”, expresó el titular del centro que nuclea a veteranos de guerra de la provincia de Buenos Aires.
Por último, Alberto Alonso recalcó que “hace 11 años que iniciamos la causa, pero no hay que dejar de ver que este pedido de la Justicia es un gran avance. Con la gran cantidad de material probatorio que aportamos a la causa, no quedaba otra más que avanzar en las detenciones”.