“No es lo mismo para el imputado que se lo sentencie por femicidio como que no. Por eso hay que ser muy cuidadosos en la investigación judicial de estos casos”, sostienen desde el EAAF (Equipo Argentino de Antropología Forense).
BUENOS AIRES (Por Gabriela Oprandi especial de NA).- El Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) que desde hace más de una década trabaja en casos de femicidios en el país promueve que la investigación de esas causas judiciales se realicen desde una perspectiva de género.
Además, desde el EAAF recomiendan que las pruebas que se sumen a los expedientes en casos de femicidios, se hagan bajo procedimientos científicos y estándares internacionales de investigación. En diálogo con NA, Sofía Egaña, antropóloga e integrante desde hace 17 años del EAAF, comentó que si bien en el país trabajan desde hace una década en casos de femicidios, ya a fines de 2004 empezaron a participar en el tema, cuando fueron convocados por el estado mexicano para investigar los casos de muertes violentas de mujeres ocurridos en Ciudad Juárez.
Allí fue justamente donde iniciaron su trayectoria en investigaciones forenses de femicidios y en la actualidad capacitan “con mirada de género”, mediante seminarios y encuentros, a los operadores de justicia que participan en las causas judiciales para que sepan “cómo abordar desde el género la información forense que surge de los casos”.
“No es lo mismo para el imputado que se lo sentencie por femicidio como que no. Por eso hay que ser muy cuidadosos en la investigación judicial de estos casos. A partir de la experiencia que tuvimos en México observamos que se necesitaban, más allá del trabajo de los movimientos de activistas, de los familiares de víctimas, y el aporte de conceptos políticos, jurídicos, filosóficos, guías y protocolos, capacitar a los operadores de justicia en este terreno, con mirada de género al analizar una muerte violenta de la mujer”, explicó.
A los jueces, fiscales, funcionarios judiciales, criminalistas y miembros de las fuerzas de seguridad, que participan en las capacitaciones que realiza el EAAF, les recomiendan que realicen un trabajo científico para reconstruir “los elementos que no aparecen en la escena del crimen, pero que están en la historia clínica de la víctima, o en la historia de abusos anteriores, o en otros signos de violencias implícitas”.
Además, en los seminarios de capacitación, en los que participa Egaña, se les insiste a los concurrentes que en la escena del crimen de un femicidio hay que buscar datos también sobre la violencia simbólica, económica y social, para poder entender por qué fue creciendo la violencia del victimario hacía su víctima, hasta terminar en la muerte violenta de la mujer.
“El femicidio tiene que ver específicamente con una motivación de género en un contexto de asimetría entre los hombres y las mujeres. En el trabajo de visibilización que llevamos adelante, a través de la experiencia de México y de otras investigaciones realizadas en Centroamérica y en Latinoamérica es que se elaboraron guías y protocolos para prevenir y erradicar la violencia contra las mujeres”, comentó la antropóloga.
Esta semana, la experta fue parte del plantel docente que estuvo a cargo del segundo Seminario de Investigación Forense en Femicidios llevado a cabo por el EAAF y que en está oportunidad fue dictado para profesionales de país.
El EAAF que fue creado en 1984 para identificar los restos óseos de las personas desaparecidas durante la última dictadura cívico militar ocurrida en el país lleva adelante diversas investigaciones relacionadas a las violaciones a los derechos humanos en diferentes países del mundo, y busca en su modelo de trabajo la transferencia de conocimientos fundamentales y aboga por las buenas prácticas forenses de todas las partes interesadas.