Videla está detenido desde 2017 cuando habiendo salido en libertad tras una condena por Violencia de Género, volvió a tomar contacto con la mujer que denunció una violación. Ayer fue condenado en una audiencia durante la cual mantuvo su rostro tapado en todo momento con sus manos. El caso judicial le costó el cargo al Comisario Marcelo Guerrero, quien está procesado.
RIO GRANDE.- El Tribunal de Juicio Oral dio a conocer ayer el veredicto en una audiencia que fue la única instancia pública del proceso, por lo cual el imputado Diego Sebastián Videla se cubrió el rostro de las cámaras a lo largo de los minutos que duró la lectura de la sentencia.
Videla fue condenado a la pena de 6 años de prisión de cumplimiento efectivo por el delito de abuso sexual con acceso carnal, cometido el 16 de mayo de 2017, cuando violó una prohibición de acercamiento a su ex pareja, apenas salido de prisión por un episodio anterior de Violencia de Género.
Esta pena fue unificada a esa anterior condena por “lesiones agravadas” en 7 años de prisión efectiva en total. Videla en sus últimas palabras había abogado por su inocencia, señalando que el vejamen no habría sucedido.
Los fundamentos del veredicto el 23 de noviembre.
Coletazo del caso
En torno a la denuncia de abuso contra Videla, como Jefe de la Comisaría Quinta, el Comisario Marcelo Guerrero había recibido, en mayo de 2017, una orden del Juzgado para que exista una consigna en el domicilio de una mujer que era acosada por su expareja.
Apremiado por la falta de personal y para no desatender la prevención en el resto del vecindario, el comisario Guerrero había acordado con la mujer retirar la consigna cada vez que se ausentaba para ir a trabajar, disponiendo la misma cada vez que llegaba a su vivienda.
Sin embargo, un día la mujer regreso a su casa, sin dar aviso de esto al Comisario y se encontró en la vivienda con su expareja, con quien discutió y luego, según la denuncia de la víctima, habría sido abusada sexualmente; hecho por el cual se inició la causa penal contra Guerrero, por presunta desobediencia de una orden judicial.
El Comisario “Whatsapp” fue pasado a disponibilidad desde que fue imputado en la causa penal y separado de su función en la fuerza policial. Conocida esta medida, algunos pocos vecinos reclamaron por esa decisión ante las autoridades policiales, pero la determinación era de la esfera judicial.
Ahora, procesado
El pasado mes de agosto, el comisario Marcelo Guerrero fue procesado por el delito de “incumplimiento de los deberes de funcionario público”, y se le trabó un embargo de casi 100 mil pesos sobre sus bienes.
Guerrero se hizo conocido como el “Comisario Whatsapp”, ya que en la Comisaría Quinta, en el barrio de Chacra XIII, había instrumentado esa red social con los vecinos, como medio de prevención del delito, lo cual trascendió incluso en algunos medios nacionales, que se hicieron eco de la novedad y de los buenos resultados que para los vecinos tenía esa herramienta.
Tras conocida la decisión del juez de Instrucción Daniel Cesari Hernández, Guerrero publicó en su muro de Facebook: “Y bueno después de tanto tiempo de esperar JUSTICIA, nunca llegó. Se me notifica de procesamiento y un embargo de casi $100.000. A pesar del difícil momento que vivo en mi carrera, hoy empiezo otra nueva etapa de lucha”.
“No voy a bajar los brazos y seguiré firme porque se lo que soy como funcionario y como persona. Sé que esto viene de otro lado. Confío en DIOS y aunque no lo creas, sigo creyendo en la JUSTICIA. Muy triste, muy dolido, con el corazón partido y las lágrimas de angustia. Mucho dolor, a refugiarme con mis hijos y obvio en DIOS. Seguiré peleando”, agregó.