BUENOS AIRES.- La presidenta Cristina Fernández de Kirchner recibió ayer a su par del Estado Plurinacional de Bolivia, Evo Morales, con quien suscribió una serie acuerdos de cooperación bilateral en materia de energía, salud, migraciones, entre otras áreas.
Tras las firmas de los acuerdos, la Mandataria argentina agradeció tanto la visita del presidente boliviano, como así también la donación del monumento a la Generala Juana Azurduy, que quedará emplazado en un espacio público ubicado junto a la Casa de Gobierno.
La Jefa de Estado destacó el fuerte impacto de las políticas sociales llevadas adelante por los gobiernos de ambos países en los últimos años, las que redundaron en una mayor inclusión social, una mayor atención hacia los sectores más vulnerables de la población, la generación de millones de nuevos puestos de trabajo y la ampliación de la clase media.
En ese marco, Cristina recordó que, de acuerdo a informes emitidos por la CEPAL y el Banco Mundial, la Argentina fue el país que más clase media ha producido en los últimos 12 años en el mundo. Y al respecto remarcó que tamaño nivel de inclusión no solo beneficia a los otrora sectores más bajos, sino a toda la sociedad en general.
La Mandataria argentina recordó en otro tramo de su discurso que cuando asumió Evo Morales como presidente de Bolivia, el entonces Jefe de Estado argentino Néstor Kirchner aceptó renegociar contratos gasíferos firmados con el vecino país y ofrecerle mejores condiciones para fomentar su desarrollo. “Néstor (Kirchner) fijó un precio que obligó al resto de los países a pagar más a los otros países por el gas boliviano”, señaló.
En ese marco, Cristina Fernández abogó por agregar más valor a la producción primaria de ambas naciones, como así también transferir tecnología e incrementar el intercambio comercial regional. “para que los recursos queden en la región y vayan retroalimentando la producción de nuestros países”.
