La Policía realizó un operativo en la vía pública para requisar un auto. Lo hizo en torno a la causa en que se investiga el atentado contra la autoridad ocurrido el 12 de noviembre, en la zona de la Margen Sur. Una pareja fue demorada al encontrar en el vehículo un arma de guerra y drogas.
RIO GRANDE.- En el marco de una investigación abierta por el tiroteo entre delincuentes y la Policía, ocurrido el pasado 12 de noviembre en la Margen Sur, personal de la Comisaría Cuarta demoró y procedió a la requisa de un automóvil Honda Civic, cuando transitaba por calle Anadón, en el sector de Chacra II. Allí se constató que el conductor era Miguel Emanuel Silva Bazán, de 27 años, una persona que tiene antecedentes penales, quien portaba un arma de fuego y drogas.
Cabe recordar que en los incidentes que sucedieron hace más de dos semanas atrás un sujeto fue detenido tras disparar al móvil policial que lo perseguía, pero uno de los cómplices alcanzó a escapar y se presume que se trataría de Silva Bazán, quien manejaba ayer un Honda Civic, de color blanco, rodado que está a nombre de un empleado municipal de ésta ciudad.
Silva Bazán estaba acompañado de una mujer quien también quedó demorada en el lugar, mientras se procedió a inspeccionar el rodado con la orden judicial correspondiente.
La requisa
A partir de la requisa que se realizó en el automóvil, la Policía pudo descubrir un arma de fuego de grueso calibre, resultando ser una Glock, 9 milímetros. Silva Bazán también contaba con una radio portátil con la frecuencia policial filtrada y una pequeña cantidad de sustancia estupefaciente, por lo que se dio intervención a la Justicia Federal.
Anoche la labor policial continuaba, por lo que se desconocía qué temperamento se adoptaría contra los dos ocupantes del vehículo.
Antecedentes con armas
Silva Bazán es un individuo que tiene antecedentes penales ya que el año pasado también fue detenido en un control ocasional que se realizó en el puente Mosconi. En esa oportunidad a Silva Bazán se le secuestró un revólver Magnum 357 de gran poder de fuego, hecho por el cual pasó varios meses detenido hasta que la fiscalía interviniente consideró una polémica interpretación legal que le permitió ser excarcelado a fines del año pasado.
En esta oportunidad vuelve a ser vinculado a la tenencia de drogas y de un arma de alto poder de fuego, considerada arma de guerra. La investigación judicial determinará ahora qué suerte correrá este sospechoso, quien podría quedar vinculado por los incidentes sucedidos en la Margen Sur el pasado 12 de noviembre.