BUENOS AIRES (NA).- Urgido por los tiempos electorales, el oficialismo de la Cámara de Diputados logró ayer alzarse con dictamen de mayoría a favor del proyecto de financiamiento de los partidos políticos, y ya hay acuerdo para que se trate en la sesión prevista para el 8 de mayo.
En un plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales, Justicia y Presupuesto, Cambiemos logró el acompañamiento de todas las bancadas opositoras a excepción del Frente para la Victoria, que firmó su propio despacho en minoría.
El oficialismo cosechó 40 rúbricas, pero no pudo evitar que los tres diputados de la Coalición Cívica que responden a Elisa Carrió votaran en «disidencia total».
En diciembre del año pasado, la líder de la Coalición Cívica había rechazado la directiva presidencial de aprobar la ley de Financiamiento.
Según supo NA de fuentes de la Coalición Cívica, la idea es votar a favor en general, pero en contra del artículo que permite los aportes de privados.
El trámite en la reunión plenaria fue raudo pero no estuvo exento de escándalos, como el que protagonizaron los legisladores Fernando Iglesias (PRO) y Carlos Castagnetto (FPV), que se cruzaron con chicanas en dos ocasiones, interrumpiendo a los gritos la sesión.
La iniciativa en debate, que la semana pasada obtuvo media sanción en el Senado con el aval de la bancada del PJ que comanda Miguel Pichetto, reforma la ley electoral y habilita las contribuciones de los privados con un tope por empresa del 2% del total permitido por la Justicia para esa campaña.
A su vez, obliga a la bancarización total de los aportes para transparentes su origen y recorrido.
En tanto, se propone bajar del 10% al 5% el espacio que los medios audiovisuales deben ceder a los partidos en período de campaña, una medida que se concibió para descongestionar el caudal publicitario que en elecciones anteriores saturaba a las audiencias.
A su vez, se busca imponer que el 60% de la publicidad digital sea destinada a medios nacionales productores de contenidos.
La rionegrina María Emilia Soria (FpV) recordó que el Gobierno decidió enviar el proyecto de financiamiento el 20 de junio del año pasado, luego de que tomara estado público el escándalo conocido como «la causa de los «aportantes truchos» de la campaña de Cambiemos en la provincia de Buenos Aires.
Calificó como «bochornoso» que «el único argumento sólido para fundamentar el aporte de empresas sea que ‘esto ocurre’ y hay que darle un marco de legalidad».