Fue en Ushuaia, donde se realizó el homenaje al general Manuel Belgrano, creador de la Bandera Nacional. “Nosotros los fueguinos hacemos nuestra promesa de lealtad a la Bandera todos los días” dijo en su discurso el vicegobernador Juan Carlos Arcando, encargado de brindar palabras alusivas a la ceremonia.
USHUAIA.- El vicegobernador Juan Carlos Arcando y la vicegobernadora electa, Mónica Urquiza, encabezaron ayer el acto por el Día de la Bandera, que se conmemora en homenaje a su creador, el general Manuel Belgrano, al cumplirse el 119º aniversario de su pase a la inmortalidad.
El acto se realizó en el gimnasio “Arquitecto Carlos Petrina» de la villa deportiva «Eva Perón»; con la presencia de los abanderados y escoltas de los diferentes niveles educativos, de las fuerzas de seguridad.
Arcando fue el encargado de brindar palabras alusivas a la ceremonia y al recordar a Belgrano dijo que “cada día que pasa, la figura de este gran patriota se agiganta más y más. Hoy, en nuestro amado fin del mundo, lo recordamos como lo hacemos cada día de nuestra vida al ver nuestra Bandera”.
Dijo que el creador de la Bandera “se destacó por su influencia y participación en cuestiones de economía, agricultura, la geometría y el dibujo. Asimismo, en su perfil de periodista, político y diplomático, sin perjuicio de que sus logros más conocidos lo son como militar”.
“Estos intereses no eran como los que tenemos muchos de nosotros que los guardamos casi en silencio. Por el contrario, él los volcó a su patria mejorando la vida de sus ciudadanos, enseñando, conduciendo, creando y transformando”, sostuvo el Vicegobernador a los presentes.
El Vicegobernador recordó que era tal el grado de su formación, que llegó a ser Presidente de la Academia de Prácticas Forenses y Economía Política en la Universidad de Salamanca (España). Allí le valió el cargo en el Consulado de Comercio Español en Buenos Aires, que ocupó hasta mayo de 1810 para formar parte de la gesta emancipadora por la libertad americana, destacándose como orador, intelectual y ferviente luchador por nuestra independencia. Recibió todos los honores como General del Ejército del Norte y también, como suele pasar, todos los cuestionamientos en su enorme mayoría injustos y que solo tenían como objetivo la lucha intestina, siempre cobarde y artera.
Arcando reconoció que “siguió luchando pese a todo, inclusive a su frágil salud. Belgrano vivió como civil y militar en la mayor austeridad. Era famoso por ser el General que vivía como un soldado raso, por su rechazo a los honores, por su generosidad y su espíritu de sacrificio”.
Más adelante indicó que Belgrano “supo de victorias y de derrotas, de elogios y de ataques. Pero, sobre todo, sabía que nuestra patria sería libre solo con sacrificio y pasión, que la victoria solo llega sobreponiéndose a la derrota y que el personalismo, era un error que pagaba siempre el pueblo”.
Arcando recordó que el año próximo se cumplen 200 años del paso a la inmortalidad del General Belgrano.
En otra parte de su discurso, Arcando expresó:
“En este homenaje a nuestra Bandera y a nuestro prócer me permito preguntarme y preguntarles: ¿Hay algún lugar de nuestro país en donde la Bandera sea más bella y amada como sucede en nuestra tierra? ¿Hay algún lugar del país donde la defensa de nuestra soberanía se asuma unánimemente por todos sus habitantes como en Tierra del Fuego?”.
“Me atrevería a decir que no. Porque nosotros los fueguinos hacemos nuestra promesa de lealtad a la Bandera todos los días, contra todo y contra todos en defensa de la identidad de todos las argentinas y argentinos. En nuestra tierra, la patria no es una promesa, si no una construcción permanente. En Tierra del Fuego no se conmemora la patria, se la hace”.
“No son buenos momentos para nuestro país, vivimos tiempos difíciles, pero miremos la Bandera y recordemos a su creador. Les aseguro que nos dará más fuerza que nunca para seguir luchando por nuestro pueblo, por nuestra tierra”.