Movimientos sociales y de izquierda marcharon en reclamo de medidas. La protesta, que tuvo una significativa convocatoria, se replicó en otros puntos del centro porteño, como en varios tramos de la autopista 25 de Mayo, así como también en algunas ciudades de otras provincias.
BUENOS AIRES (NA).- Movimientos sociales y de izquierda se movilizaron ayer en diferentes puntos de la Ciudad de Buenos Aires para reclamarle al Gobierno nacional nuevas medidas para hacer frente a la “crisis social” que afecta a los sectores más vulnerables.
Las organizaciones se concentraron desde la mañana de este miércoles en varios puntos de la Capital Federal para luego marchar al Ministerio de Salud y Desarrollo Social, ubicado sobre las avenidas 9 de Julio y Belgrano, donde realizaron un acto central.
Las columnas de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), Barrios de Pie, la Corriente Clasista y Combativa (CCC) y el Polo Obrero, entre otras organizaciones, realizaron cortes en estas zonas, por lo que el tránsito estuvo varias horas complicado y el Metrobus permaneció cortado.
Uno de los oradores de la jornada fue el dirigente de la CTEP, Juan Grabois, quien a través de su cuenta de Twitter sostuvo que “el hambre no espera” y le pidió al presidente Mauricio Macri que “deje de boludear y buscar culpables” y se ponga “a trabajar y a buscar soluciones”.
Algunas de las “medidas concretas y urgentes” reclamadas son el aumento del Salario Social Complementario, la convocatoria al sector de la economía popular al Consejo del Salario, implementación de leyes de emergencia y “soluciones reales”, un bono de 2.000 pesos para los trabajadores informales, así como también una Ley de Emergencia Alimentaria y un “aumento extraordinario” para las jubilaciones mínimas.
En las cercanías del Ministerio de Desarrollo Social que conduce Carolina Stanley se montó un fuerte operativo de seguridad y pasadas las 13:00 comenzaron a desconcentrarse los manifestantes y se empezó a normalizar la circulación de vehículos.
“El Gobierno debería declarar la emergencia alimentaria y social para todo el país. Lo más importante es detener el hambre más urgente, en la movilización de hoy hay gente que no sabe si esta noche va a comer. Estos son los sectores más agredidos por el actual trazado económico”, sostuvo por su parte el dirigente gremial Juan Carlos Schmid.
“Este país hubiera sido inviable sin el trabajo de las organizaciones sociales. Hay que abrirle la puerta a los trabajadores de la economía popular que deben sentarse en el Consejo del Salario”, agregó Schmid, quien encabezó la columna de trabajadores y portuarios agrupados en la Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval (FEMPINRA).