A partir de este miércoles 5 de febrero, Nicolás Paredes comenzará a entrenar con el primer elenco de Futsal AFA de Boca Juniors tras estampar por la tarde su firma. El mejor jugador de la Patagonia abandona al multicampeón Estrella Austral para perseguir su sueño de jugar en la mejor liga del país y sobre todo en el club del cual es hincha al igual que casi toda su familia. Jugará junto al ushuaiense Kiki Vaporaki y quizás con el riograndense Mauro Rain.
RIO GRANDE.- A partir de este miércoles por la noche, Nicolás Paredes comenzará a transitar su sueño más deseado, entrenar con el plantel de Futsal de Boca Juniors que el viernes pasado comenzó la pretemporada 2020 con vistas a mantenerse en lo más alto de la elite de éste deporte en el país.
El jugador riograndense aceptó el jueves pasado las condiciones que le propuso Esteban Pizzi, coordinador General de Deporte Amateur de la institución Xeneize; tras una reunión en la mítica confitería “El Roca” con Fernando Oyarzo encargado de llevar adelante la gestión de la contratación del cierre de Estrella Austral.
Desde los últimos días del año pasado el crack local había escuchado la posibilidad de emigrar a distintos elencos profesionales de Buenos Aires, incluyendo al conjunto de la Rivera, y de inmediato se manifestó muy interesado en probar suerte en el conjunto del cual es hincha, sin embargo no hubo ningún contacto oficial hasta la semana pasada cuando el cuerpo técnico de Boca se decidió por sumarlo a su nuevo y joven plantel, justo un día antes de arrancar la pretemporada que comenzó el viernes 31 de enero.
Será la primera vez que un jugador de Río Grande viajará con un contrato importante pese a no tener experiencia en la elite de la disciplina, lo que habla de la confianza que tiene Boca en el jugador fueguino y en el proyecto de renovación que tienen Hernán Garcías y Coco Mareco (exTécnico de Villa La Ñata, campeón Nacional en Ushuaia).
Paredes compartirá plantel con el ushuaiense Kiki Vaporaki – Alamiro se desvinculó del Club-, y con el riograndense Mauro Rain quien hace dos años que forma parte de las divisiones menores de la institución y que este año arrancará con las mismas chances que cualquiera por mantenerse más tiempo con el equipo de primera y no tanto con el de reserva, incluso en esta temporada se suman otros dos valores de Escuela Argentina, Ariel Agustín Gueicha y Fernando Lescano.
Boca mantuvo a pocos jugadores del plantel 2019 y mucho tuvo que ver las cinco derrotas en las seis finales a las que llegó, por ello sumó entre otros al arquero Guido Mosenson (libre), Cahuana Murillo (Gimnasia), Lucas Flores (Banfield) y Lucio Thorp (Banfield).
Mientras que se alejaron Alamiro Vaporaki, Lucas Farach, Mauro Taffarel, Andrés Geraghty, Andrés Santos, Paky López, Lucas Quispe y el campeón Mundial Santiago Basile.
“Un sueño”
Cuando a fin de año El Sureño le mencionó la posibilidad de ir a Boca ya que estaban interesado en él, Paredes lo tomaba con pinzas, no quería ilusionarse hasta tanto alguien se comunicase oficialmente con él, y ahora con todo abrochado no lo puede creer: “Es un sueño, jugar en la mejor Liga del país y en el club que siempre quise ir; hace unos tres años había tenido la chance de ir a probarme a Boca pero no estaba listo, era muy joven y no tenía muy en claro lo que quería, creo que ahora estoy listo para jugar con los mejores”.
“La posibilidad de compartir un plantel con Kiki (por Vaporaki) es una gran oportunidad al igual que con el resto del plantel que es muy joven y que me ayudará a integrarme más rápido y poder dar lo mejor de mi y ganarme un lugar rápidamente entre los que salen a la cancha”, mencionó el excierre de la Selección de Río Grande.
Nicolás viajará en las primeras horas del miércoles junto a su padre Pepe quien se encargará de conseguir un departamento en cercanías a Casa Amarilla para que su hijo no pierda tanto tiempo en viajes al barrio de la Boca, teniendo en cuenta que varios días de la semana la institución realiza doble turnos y de no permanecer en la sede, perderá mucho tiempo viajando.
Y en pocas semanas, se sumará su pareja, la también jugadora Neda Cvitanic, quien dejará Metalúrgico para sumarse al plantel femenino de Boca Juniors, estará a prueba por un tiempo en busca de poder ganarse un lugar definitivo en el plantel, y sabiendo de sus cualidades, tiene muchas chances de poder integrar el elenco y ser así, un apoyo importante en Buenos Aires para el mejor jugador fueguino de los últimos tiempos.