USHUAIA.- Luego de consagrarse campeón patagónico en Puerto Madryn, el joven rider capitalino Bautista Mazzone viajó hacia Rosario para la etapa nacional donde cosechó un más que importante quinto lugar. “Me guardo una experiencia inolvidable. La pasé muy bien y ojalá esto sea el puntapié para nuevos retos”, enfatizó.
Bautista Mazzone es un joven ushuaiense de 16 años que se inició desde chico con una patineta bajo el brazo y sueña con vivir de lo que le apasiona. “Arranqué en el Skate desde muy chico, a los 2 años mi mamá me compró una patineta rechica con la que me enseñó a pararme y recuerdo que a los 7 años me empezó a gustar mucho y ya lo practicaba con regularidad”, comenta.
Su camino siguió con entrenamiento y perfeccionamiento hasta que empezó a hacerse notar en las competencias provinciales y dejó en evidencia este crecimiento con el podio obtenido en la Fase Regional del Campeonato Argentino del año pasado.
Pero ahora fue por más y en Madryn obtuvo el título regional Sub 18 allá por el mes de diciembre: “Mi gran objetivo es poder llegar a vivir de esto, tratar de que la gente empiece a verlo más como un deporte y no como un juego. Si tuviera que elegir un sueño es andar hasta que me muera o hasta que mi cuerpo ya no me lo permita”.
Ahora el destino le ponía enfrente una parada complicada en Rosario, donde llegó apoyado por Andino Gym en la preparación física, además de todas las horas dedicadas arriba de la tabla para afinar trucos, practicar rutinas y afianzar movimientos técnicos que en una competencia de tamaña índole marcan la diferencia.
“Viajé y apenas llegué me fui a patinar. Tuvimos dos jornadas de prácticas en Buenos Aires bajo mucho calor y conseguí tres tablas gracias a Bien al Sur, que colaboró conmigo para poder llegar en condiciones”, comenzó resumiendo.
Y prosiguió con su arribo a Santa Fe: “Fui a ver el skatepark en Rosario andando mañana y tarde sin parar. Al otro día fue la competencia, de menor edad hasta los más grandes. Tiré las de siempre y me pude quedar con un gran quinto puesto. No me lo esperaba”.
Es que si bien se había entrenado mucho, en la primera pasada una pequeña traba en una de las ruedas lo complicó, sacándolo de eje sin poder finalizar en buena forma.
No obstante y ayudado por la fortuna de una Vaquita de San Antonio, en la segunda pasada pudo demostrar toda su calidad para hacerla a la perfección y sacarse la espina. “Éramos 20 por categoría, de todos lados. Mi idea era viajar y con este resultado quedé más que satisfecho”, tiró con alegría.
Ya después de la competencia todo siguió de maravillas, patinando, conociendo gente y disfrutando de lo que le apasiona. “Grabé un video que lo subí a mi Instagram y culminé andando a tope en Buenos Aires. Me guardo una experiencia inolvidable. La pasé muy bien y ojalá esto sea el puntapié para nuevos retos”, concluyó.
Mazzone, otro fueguino que dejó su marca a nivel nacional.
