Aerolíneas Argentinas anunció que ya tiene listos sus nuevos protocolos de salud y medidas de higiene que serán aplicados una vez que regresen las operaciones regulares tras la pandemia de COVID-19, en principio previstas a partir del 1° de septiembre.
USHUAIA.- La empresa Aerolíneas Argentinas hizo público un documento con las medidas preventivas que se llevarán a adelante en cada una de las etapas del viaje tanto en los aeropuertos como en vuelo, cuando a partir de septiembre retome la actividad aérea.
Los procedimientos fueron diseñados siguiendo las recomendaciones de IATA (International Air Transport Association), ACI (Air Transport Council), OMS (Organización Mundial de la Salud) y el Ministerio de Salud de la Nación.
La empresa recomienda a sus pasajeros que lleguen con mayor anticipación y teniendo en cuenta que solo podrán ingresar las personas que vuelen, sin acompañantes.
En la puerta de acceso a los aeropuertos, se controlará la temperatura de los pasajeros, quienes deberán usar barbijo o tapaboca en todo momento.
Los pasajeros que requieran algún tipo de asistencia, como el uso de silla de ruedas, deberán hacer la reserva por lo menos 48 hs. hábiles antes de la partida del vuelo, ya que todas las sillas de ruedas son desinfectdas antes de su uso.
A los pasajeros se les recomienda llegar con el web check-in ya listo y en el caso de tener que realizar el check-in en el aeropuerto, se deberá respetar la distancia social mínima de separación en la fila.
Para validar la identidad únicamente se deberá mostrar el DNI, sin necesidad de entregar la documentación al personal de tráfico.
En el protocolo se sugiere viajar únicamente con un artículo personal a bordo, cumpliendo con las medidas máximas, de modo de agilizar el embarque y desembarque y minimizar los movimientos dentro del aeropuerto.
En el equipaje de mano estará permitido llevar un alcohol en gel de hasta 100 ml.
El embarque se realizará por grupos reducidos y de las últimas filas hacia adelante. Los clientes que viajen en cabina Business o Premium Economy serán los últimos en embarcar.
Una vez validada la identidad, el pasajero tendrá que escanear su boarding pass en el lector correspondiente.
Siempre que sea posible se embarcará por puertas con mangas de acceso, pero de ser necesario el uso de micros, el traslado se hará en grupos reducidos.
Las salas VIP (Salón Cóndor en Ezeiza y las salas del exterior) permanecerán cerradas hasta nuevo aviso.
Durante el vuelo será obligatorio en todo momento el uso de barbijos o tapabocas, tanto en los pasajeros como en las tripulaciones.
Los pasajeros deberán limitar al máximo sus movimiento dentro del avión. En el caso de necesitar ir al toilette, deberán verificar antes que el cartel indicador de disponibilidad se encuentre encendido en color verde para no formar fila.
Por el momento los aviones no contarán con material de lectura, mantas, almohadas ni auriculares.
En los vuelos de cabotaje y regionales también quedarán suspendidos los servicios de comidas y bebidas.
En los vuelos internacionales, el servicio de alimentos y bebidas a bordo será limitado: se ofrecerá un menú de contingencia en bolsas individuales, con productos frescos e industrializados, y al finalizar se solicitará descartar todos los elementos en la misma bolsa en la que se los recibió para disminuir la interacción con la tripulación.
Los servicios de comidas especiales y moisés también estarán temporalmente suspendidos.
Para desembarcar, los pasajeros podrán levantarse de sus asientos recién cuando la tripulación lo indique y la fila delantera se encuentre desocupada. Habrá que mantener en todo momento el distanciamiento recomendado y desocupar el avión de fila en fila.
Por otra parte, la empresa señaló que por su tratamiento de limpieza y sus filtros especiales de aire acondicionado, sus aviones cuentan con “altos estándares de cuidado y prevención”.
Personal provisto de equipo de protección (Personal Protective Equipment) realizará el procedimiento de limpieza y desinfección antes y después de cada vuelo.
Las tareas se intensifican en las zonas de alto contacto como asientos, apoyabrazos, mesas rebatibles, cinturones de seguridad, pantallas y controles. También se realizará un trabajo minucioso en baños, cestos de residuos, y puertas.
El protector del apoyacabeza será reemplazado luego de cada vuelo y se reforzarán los procedimientos de limpieza en tapicería y alfombras.
La empresa aclaró que cuenta con un sistema de aire acondicionado que posee filtros especiales de alta eficiencia (HEPA, High Efficency Particulalate Air filters). “Este sistema utilizado por la industria permite la renovación constante del aire de la cabina, eliminando el 99,9% de bacterias y microbios que circulan para hacer del avión un lugar seguro”, según destacó.