BUENOS AIRES (NA).- Una familia tipo necesitó $54.208 en diciembre último para no caer en la pobreza y la canasta alimentaria se disparó 45,5% en 2020, más de nueve puntos por encima de la inflación, que fue del 36,1%, informó ayer el INDEC.
En el caso de la canasta total, que permite medir la pobreza, subió 4,7% en diciembre y 39,1% en el 2020, por lo que también quedó por encima del nivel de costo de vida, aunque la diferencia fue mucho menor, de tres puntos porcentuales.
Para no ser indigente, una familia requirió ingresos por $22.681, según la estimación realizada por el organismo sobre la base de cuatro miembros.
La canasta alimentaria subió 5,1% en diciembre y 45,5% en el 2020, 9,4 puntos por encima del costo de vida del año.
El costo de la canasta básica casi triplica el monto del salario mínimo de $20.587 establecido para diciembre, y el de un haber básico jubilatorio, que se ubica en $19.035. .
El aumento de ambas canastas de diciembre superó también al de los precios minoristas del 4%, según el Índice de Precios al Consumidor (IPC).
El costo nominal de la canasta total en todo el año pasado aumentó $15.247, ya que en diciembre último se ubicaba en $38.960.
En la misma comparación, la alimentaria aumentó $7.096, desde los $15.584 que costaba en diciembre del 2019.
Para no caer en situación de pobreza, una familia formada por dos adultos y dos menores, que no paga alquiler, debió tener ingresos de $54.208 por mes.
El INDEC también mide los ingresos necesarios por familias con otras cantidad de integrantes: para una de tres miembros, el costo de la Canasta Total llegó en diciembre a $43.155, y la Alimentaria a $18.056.
En el caso de un hogar de cinco miembros, la canasta total fue de $57.014 y la alimentaria de $23.855.
Para un solo adulto, el INDEC estimó que en diciembre el costo de la canasta total fue de $17.542 y la alimentaria de $7.340.