Como cada vez que se registran altas temperaturas y fuertes vientos, la Laguna Seca volvió a cubrir de polvo un gran sector de Río Grande. Las zonas más afectadas fueron el Aeropuerto y los barrios de sus alrededores; la zona de Chacra IV y hasta el barrio Profesional. Los vecinos reclaman una solución de fondo.
RIO GRANDE.- A pesar de los trabajos realizados por las autoridades gubernamentales, y luego del anuncio de la finalización de las labores que iba a garantizar la humedad en el sector y el fin de las tormentas de polvo la Laguna Seca volvió a cubrir con sedimentos gran parte de esta ciudad.
Así se pudo ver ayer, en momentos en que en la ciudad imperaba una temperatura superior a los 28 grados centígrados y era azotada por vientos de unos 50 kms/h y con ráfagas que superaban los 70kms/h. En esos momentos se pudo ver una verdadera tormenta de polvo que cubrió la gran parte del norte de la ciudad.
Las zonas más afectadas fueron el aeropuerto internacional Ramón Trejo Noel, los barrios de sus alrededores, la zona de chacra IV y hasta el barrio Profesional, ya que el viento era del oeste y a un promedio de 67 kilómetros por hora, de acuerdo a lo que indicó el Servicio Meterológico Nacional (SMN), donde además se consignó: “Algo nublado con polvo levantado por el viento”, una nueva característica al momento de difundir el clima reinante.
La obra no se ve por el polvo
Cabe destacar que durante el 2020 se llevó adelante la última parte de la obra del sistema de bombeo de agua para mantener la laguna húmeda y eso sería la solución del problema.
Esa obra quedó terminada a fines de diciembre y fue la propia ministro de Obras y Servicios Públicos de la provincia, Gabriela Castillo quien junto a vecinos y funcionarios recorrió el sector con la obra finalizada.
La obra presentada por el Gobierno consiste en un sistema de bombeo con una toma en el Río Grande, destinado a regar ese sector de la ciudad y la Laguna de los Cisnes, y evitar las tormentas de polvo provocadas por el viento y que año a año afectan a los barrios aledaños.
Gabriela Castillo había señalado que con el sistema de bombeo “se tendría la laguna húmeda y que eso evitaría la polución que es lo que ponía en una situación difícil a todos los vecinos de la ciudad y principalmente a los barrios aledaños”.
Al parecer, el volumen de agua que es vertido en el sector de la laguna seca no logra ser el suficiente para tenerla humedecida, por lo tanto, las tormentas de polvo seguirán persistiendo en jornadas donde se dé el cóctel perfecto: Altas temperatura y fuertes vientos.