De acuerdo con el psiquiatra noruego Finn Skårderud, el ser humano nace con un déficit de alcohol en la sangre del 0,05%, una tesis que sugiere que el consumo diario y moderado de alcohol podría ser necesario para hacer del mundo un lugar más llevadero.
Con la ambición de llevar a cabo un experimento social, en Otra ronda cuatro profesores de secundaria deciden comprobar los efectos sociológicos de mantener la tasa de alcohol en la sangre en un manejable 0,5%, lo idóneo (en teoría) para ensalzar la productividad diaria sin perder el control de uno mismo. Este número, una cifra a primera instancia insignificante, es lo suficiente para alterar nociones perceptivas, desinhibir el comportamiento y ocasionar una leve pérdida de la motricidad del cuerpo, lo que se traduce con mayor frecuencia en la característica torpeza de quien se ha bebido una copa de más, acompañado de un andar tambaleante y una conducta desenvuelta inexistente en los momentos de sobriedad.
En el centro del relato se encuentra Martin, un profesor de historia, que es acusado por sus propios alumnos de exhibir un comportamiento apático e indiferente durante sus clases. En casa, con dos hijos y una esposa que parecieran evitar su presencia, el agobio es aún peor. Los demás personajes, si bien se encuentran en situaciones distintas, padecen de un malestar común y constante; ya hace tiempo se rindieron a la depresión de la mediana edad y en sus vidas prima una permanente sensación de insatisfacción y soledad, ya sea en el entorno familiar o laboral. Por si fuera poco, conviven en el instituto con un colectivo que representa su némesis simbólica, un grupo de jóvenes ávidos con tanta sed por el futuro como despreocupación por el presente, y que además recuerdan en su sola existencia la sombra de quienes alguna vez fueron estos adultos.
Título original: Druk
Género: Drama
Estreno: 29.04.2021