Tierra del Fuego conmemora el trigésimo aniversario de su provincialización en un año muy particular, dentro de un contexto que nos tiene abocados a preservar la vida.
Pero a pesar de la pandemia que nos azota, como cada año es meritorio reconocer el esfuerzo y dedicación de destacados personajes, ciudadanos e instituciones que gestaron con fecunda pasión y labor la Carta Magna, la cual nos convirtió en la provincia más joven de nuestro país.
Hemos recorrido 30 años con gobierno propio, con aciertos y errores, apostando al desarrollo, la producción, la integración, el progreso; respetando la diversidad, acogiendo a compatriotas y extranjeros que encontraron en Tierra del Fuego una tierra de oportunidades y un lugar que nos acoge.
Una Isla rodeada de bellos paisajes con gélidos inviernos y largos días de verano; una tierra rica acompañada de un mar inmenso que baña nuestra costa patagónica donde los recursosnaturales fueron la base de la cultura que nos precedió. Una tierra donde brota el gas y el petróleo.
Para agradecer todo lo que nos ofrece merece que sigamos cuidando sus recursos, con la debida legislación y con el compromiso de cada ciudadano; manteniendo la esperanza de un futuro sostenible para que las generaciones venideras puedan seguir disfrutando junto a sus familias y logren encontrar su fuente laboral.
Todo esto protegiendo el horizonte que, como argentinos y fueguinos, nos han transmitido durante años el cual es no olvidarnos de nuestras Islas Malvinas.