Una cebra bebé está revolucionando la reserva Masai Mara en Kenia y las redes sociales. El animal, llamado Tira, no luce las tradicionales rayas blancas y negras sino que es de color marrón y su cuerpo está salpicado de puntos blancos, como si se tratara de lunares. El hallazgo de esta criatura con esta particular mutación genética lo hizo el pasado día 14 un guía Maasai que paseaba por la reserva.
Cebra de lunares con los colores invertidos
La peculiaridad del animal no son sólo los lunares, sino que tiene los colores invertidos. Las cebras son blancas con rayas negras y este animal es marrón con puntos blancos.
Según relata en su página web Wildest Africa, no es la primera vez que se produce un caso similar. Hace unos años, ocurrió algo similar porque la cebra tenía los colores invertidos pero conservaba las rayas.
Según apuntan, una de las posibilidades de esa mutación genética puede ser el cambio climático. A pesar de tener un aspecto diferente, el animal no ha sido rechaza por sus padres, que lo mantienen dentro de la manada.
Un estudio demostró a primeros de junio que las rayas de las cebras eran un mecanismo que servía para regular su temperatura corporal, en lugar de servir para deslumbrar a los insectos y protegerse de las enfermedades como se creía hasta el momento.
Los autores del estudio publicado en “Journal of Natural History” argumentaron que las rayas es la forma especial con la que las cebras sudan para hacer que su temperatura baje y las pequeñas convecciones de aire creadas entre las rayas ayudan a la evaporación, mientras que la capacidad no registrada previamente de las cebras para erigir sus franjas negras es una ayuda adicional para la pérdida de calor.
Fuente: Paco Rodríguez / La Razón