La participación en las urnas volvió a ser alta: superó el 80 por ciento del padrón

Ayer hubo un nivel muy importante de participación, apenas inferior al registrado en primera vuelta. En tanto, el porcentaje del electorado nacional que decidió votar en blanco fue de apenas el 1,2 por ciento del padrón.
BUENOS AIRES (NA).- De acuerdo a los datos del escrutinio provisorio, el 80,65 por ciento de los electores del padrón habilitado para sufragar concurrió a las urnas, lo cual representa un nivel muy importante de participación, apenas inferior al registrado en primera vuelta.

El total de ciudadanos que se acercó a las mesas de votación para plasmar su voluntad electoral, con el 80 por ciento de las mesas escrutadas, fue del 80,8 por ciento, mientras que el 25 de octubre pasado esa cifra ascendía al 81,07 por ciento (de un total de 32.130.853 de electores hábiles cumplieron con su deber cívico 26.048.446).

En las primarias del 9 de agosto, el nivel de participación había sido sensiblemente menor, ya que apenas el 74,91 (24.021.816) por ciento de las personas habilitadas para emitir el voto manifestaron su voluntad electoral en los establecimientos designados.

En 2011, en ocasión de la reelección de Cristina Fernández de Kirchner, habían sufragado el 79,38 por ciento de los empadronados, mientras que en las nacionales de 2007, en el primer triunfo de la actual jefa de Estado, la participación fue del 76,18 por ciento.

Cuatro años antes, cuando resultó electo el fallecido Néstor Kirchner, fue el 78,21 por ciento el que concurrió a las urnas para elegir Presidente.

En tanto, en 1999, la participación fue del 82,29 por ciento, mientras que en 1995 fue del 82,02, en 1989 estuvo en el 85,29 y en las elecciones de 1983 votó el 85,61 por ciento.
Escasos votos blancos

El porcentaje del electorado nacional que decidió votar en blanco en el balotaje presidencial fue de apenas el 1,2 por ciento del padrón, lo cual configura un nivel muy bajo en comparación con las primarias y la primera vuelta.

El porcentaje de votantes que decidió darle la espalda tanto a Daniel Scioli (FpV) como a Mauricio Macri (Cambiemos) fue tan módico que representó apenas la tercera parte del total porcentual que obtuvo en la primera vuelta el entonces candidato presidencial del Frente de Izquierda, Nicolás del Caño, quien logró el 3,23 por ciento.

Del Caño fue el único expostulante presidencial que militó activamente el voto en blanco y que incluso llegó a pedir espacios en medios audiovisuales para promover esa opción electoral, requerimiento que fue denegado por la Justicia Electoral.

Los votos afirmativos, ya sea por uno u otro espacio, alcanzaron al 97,4 por ciento de la masa total de votos; en tanto que los votos nulos fueron del orden del 1,3 por ciento; y finalmente los recurridos e impugnados explicaron el 0,05 por ciento.

En la primera vuelta electoral del 25 de octubre el porcentaje de voto en blanco había tenido un impacto mucho mayor, al representar el 2,55 por ciento del total de votos emitidos (664.740 electores).

En esa oportunidad, los votos anulados llegaron al 0,77 por ciento (199.449), sobre un total de 26.048.446 de votos emitidos.

En las elecciones primarias del 9 de agosto, el porcentaje de voto en blanco había sido más de cinco veces mayor al registrado en este balotaje, al haber alcanzado el 5,06 por ciento (1.216.634).

Entre etapa y etapa electoral, el volumen de indecisos se fue reduciendo, y en la medida en que la mayor parte de ese segmento fue absorbida por la propuesta de Cambiemos, las aspiraciones presidenciales de Macri lograron mayor envión.

Hubo una importante participación de votantes en la segunda vuelta.
Hubo una importante participación de votantes en la segunda vuelta.