USHUAIA.- El deporte adaptado fueguino tuvo una nueva manifestación de bienestar y consolidación con la efectiva realización de la sexta edición del tradicional evento denominado Facundo Rivas, que es convocado y organizado por el CAAD Ushuaia y apunta, principalmente, al desarrollo de los jóvenes con discapacidad de la región.
La presente versión se desplegó en el transcurso del viernes y el sábado en las instalaciones del Complejo Polideportivo Municipal y contó con la participación activa de más de 200 protagonistas, que se desenvolvieron en las disciplinas propuestas: atletismo, con pruebas de pista y campo; natación, tenis de mesa, boccias y torball. Este último, a modo de exhibición, de la mano de un grupo de practicantes provenientes de Buenos Aires, que mostraron abiertamente las particularidades del novedoso deporte a todos los participantes y espectadores que se congregaron para la ocasión.
El evento, que surgió hace seis años como una puesta en escena del deporte adaptado provincial en el marco del «Día Internacional de la Discapacidad», que se conmemora, año tras año, el día 3 de diciembre; trascendió las esferas del plano local y, actualmente, nuclea a los atletas con discapacidad de Ushuaia y Río Grande, junto a la venida de los exponentes de Río Gallegos y, esta edición, sumó a los participantes de Buenos Aires que, a diferencia del año pasado, incrementó su delegación en el Fin del Mundo.
Uno de los integrantes del staff de profesores del departamento de Deportes del CAAD es Lisandro Muhoberac, quien además cumple funciones en el cuerpo técnico de la Selección Argentina de Atletismo para atletas con parálisis cerebral. Justamente, el propio profesor, en diálogo con El Sureño, destacó el notable marco contenido en el Facundo Rivas y expresó su entera satisfacción por la continuidad alcanzada con el correr del tiempo.
«En esta edición hemos tenido unos 207 inscriptos con muchos chicos en pista, de Río Gallegos, de Río Grande, de Buenos Aires y muchos integrantes de Ushuaia. Esto nos pone muy contentos porque cumplimos con el objetivo que tenemos como misión, que es alcanzar a la mayor cantidad de personas con discapacidad», mencionó Muhoberac.
El profesor del CAAD recordó que, en sus inicios, «el Facundo Rivas se originó como un torneo solamente de atletismo y hoy se logró enmarcar, dentro de los dos días de actividad, unos cinco o seis deportes, los cuales algunos se llevan adelante en modalidad de encuentros y otros bajo la cualidad de torneos» y, desde luego, ni el más entusiasta de los integrantes del plantel de profesores, en los primeros pasos de la apuesta del certamen, pensó o imaginó que la planificación y el trabajo exhibido a largo plazo derivarían en esta grata actualidad.
«Es una felicidad tremenda ver todo ese camino que han transitado los chicos, por su respuesta; y a la vez por la evolución que hemos tenido con el paso de los años», aseguró , con muestras palpables de emoción y satisfacción por lo construido junto al Centro de Actividades de la capital fueguina, que elaboró un inmenso proyecto de desarrollo deportivo que se vio plasmado en una mayor inclusión para los chicos y en formidables rendimientos en citas nacionales, patagónicas, ingresos a diferentes seleccionados y hasta auspiciosas participaciones internacionales de los atletas fueguinos. Una auténtica revolución del deporte adaptado de Tierra del Fuego.
En referencia a la plataforma de disciplinas que se acrecienta edición tras edición del Facundo Rivas, Muhoberac puntualizó que «uno piensa en las distintas discapacidades que posee nuestra sociedad y hay que adaptarse a las complicaciones motrices, cognitivas, sensoriales y demás que puedan tener nuestros deportistas, a raíz de esto es que empezamos con natación, seguimos con boccias, que está destinado a personas con movilidad muy reducida y nos da un abanico de edades mayores porque tenemos personas que alcanzan los 50 años, tenis de mesa, torball, que es exclusivo para ciegos; tratamos de cubrir todos los frentes para que las personas con discapacidad queden en igualdad de condiciones a la hora de buscar una actividad deportiva».
La intención clara a futuro es poder pegar un salto aún mayor en la puesta en escena del Facundo Rivas y así pues, instalar el evento a nivel regional. Y así como ya sucede desde hace varios años con la delegación proveniente de Río Gallegos, seducir con la propuesta a las demás ciudades santacruceñas para que emulen a la capital y se acerquen hasta Ushuaia a la disputa del torneo para fortalecer las especialidades, generando un gran punto de encuentro desde la Patagonia.
