Griselda nació un 15 de junio de 1971 en Río Grande y luego de transcurrir sus estudios primarios y secundarios en nuestra ciudad, viajó a Córdoba para recibirse de profesora de Inglés. Con su diploma en mano regresó para ejercer su profesión en varios colegios, como el IFEI y el EADEB, hasta que la vida la llevó muy lejos para seguir ejerciendo a miles de kilómetros, en Estados Unidos.
RIO GRANDE.- Asentada en la ciudad de Florence, Carolina del Sur, formó una familia junto a David, con quien concibió su hija Margaret Jillian.
Sus lazos con Río Grande siempre los mantuvo, con contactos directos con la familia, que se facilitaron en la medida que la tecnología fue avanzando. Así, la distancia se fue haciendo un poco más corta. En forma habitual regresaba a Río Grande para reencontrarse con su familia y amigos con los que nunca perdió comunicación; pero durante el 2020 y 2021 eso fue impedido por la pandemia mundial, algo que golpeó a todos.
Regreso y reencuentro
Este 2022, con las restricciones flexibilizadas para poder viajar, Griselda y Jillian regresaron a Río Grande para el reencuentro con sus lazos familiares y con la de sus amigas y amigos. Este viaje fue especial, porque su hija cumplió los 15 años en este suelo fueguino y porque ambas pudieron ver la transformación de la ciudad en estos 101 años de vida.
Todo fue casi perfecto, lo único que faltó fue la presencia física de su padre, Esteban, a quien recuerda como un antiguo poblador de Río Grande el cual llegó a nuestra ciudad cuando estaba todo por hacerse, que padeció los crudos inviernos soportados a base de calefacción a leña, con la falta de agua por cañerías congeladas y con el sacrificio de trabajar en la nieve, con temperaturas bajo cero.
Esteban fue protagonista en la construcción del Paso Garibaldi, en la construcción de la calle Maipú en Ushuaia, de rellenar los terrenos ganados al río Grande para el asentamiento del barrio conocido como “La Vega” y, formando el primer plantel que tuvo YPF en Río Grande, viendo nacer lo que fue el campamento ubicado camino al Cabo Domingo.
Jillian nos contó: “I love coming to Rio Grande because my family is here and I love traveling and doing activities with them. I love Rio Grande because I love the cold and I love walking around, going to stores, and getting some fresh air”.
Lo cual significa: Amo venir a Río Grande porque mi familia está aquí y amo viajar y hacer actividades con ellos. Amo Río Grande porque me gusta el frío y me gusta caminar, ir de compras y tomar algo de aire puro”.
Griselda nos dijo: ”Río Grande siempre está presente en mi aula y en mi hogar a través de posters, fotos y souvenirs. Mientras la vida y la salud me lo permita, seguiré viniendo a mi Río Grande querido para disfrutar de mi familia y amigos como así también de la comida tradicional argentina!”.