BUENOS AIRES.- El Gobierno defendió el viernes en Londres su denuncia contra las petroleras extranjeras que realizan exploraciones en las Islas Malvinas y Gran Bretaña salió al cruce y tildó la demanda como «un ejemplo escandaloso de la intimidación contra «el derecho de los habitantes de las islas».
La semana pasada, los ministerios de Relaciones Exteriores y de Planificación Federal presentaron una denuncia penal contra las empresas británicas Rockhopper Exploration, Premier Oil, Falkland Oil and Gas Limited y las estadounidenses Noble Energy y Edison International por las actividades que realizaban en la plataforma continental reclamada por la Argentina.
«La Argentina va a utilizar toda la fuerza del derecho nacional e internacional para evitar que los recursos argentinos sean expoliados», afirmó el secretario de Asuntos Relativos a Malvinas, Daniel Filmus, en una rueda de prensa en la residencia de la embajadora en Londres, Alicia Castro, publicó la agencia AFP.
Además, a través de su cuenta de la red social Twitter, Filmus resaltó que «algunas empresas ya han sido sancionadas administrativamente y tienen prohibición de operar en la plataforma continental argentina».
Para el Gobierno argentino, es «ilícita» la explotación de recursos en las aguas territoriales del archipiélago, en disputa con Gran Bretaña desde 1833.
Filmus recordó que la Ley 26.659 de Hidrocarburos, reformada a fines de 2013 por el Congreso, considera que la explotación petrolífera ilegal está penada con entre cinco y diez años de cárcel.
Por su parte, el canciller británico, Philip Hammond, criticó la demanda argentina y aseguró que se trata de «un ejemplo escandaloso de la intimidación y las amenazas contra el derecho de los habitantes de las Islas Malvinas para desarrollar sus recursos económicos».
«La Argentina debe detener este tipo de comportamiento y comenzar a actuar como un miembro responsable de la comunidad internacional», agregó el ministro de Relaciones Exteriores del Reino Unido en declaraciones a la cadena Sky News.