La protesta que unos 300 empleados municipales realizaban sobre calle 12 frente al Municipio, donde cortaban el tránsito, terminó con incidentes cuando cerca de las 10:00 de ayer un grupo de manifestantes chocó con un cordón de efectivos del cuerpo de Infantería. «Pelear contra estas estructuras políticas no es gratis, estos ataques son la respuesta que nos envían», consideró el intendente Julio Garró.
LA PLATA (NA).- La Policía bonaerense reprimió ayer con balas de goma y gases lacrimógenos una protesta frente a la sede de la Municipalidad de La Plata por la «revisión» de 4.500 contratos de trabajo, y el intendente Julio Garró denunció que «punteros de la vieja política» organizaron disturbios.
La protesta que unos 300 empleados municipales realizaban sobre calle 12 frente al Municipio, donde cortaban el tránsito, terminó con incidentes cuando cerca de las 10:00 de ayer un grupo de manifestantes chocó con un cordón de efectivos del cuerpo de Infantería.
Según indicaron los propios trabajadores municipales, un grupo que ingresó por la calle 14 comenzó a lanzar piedras contra los agentes policiales, quienes contestaron con balas de goma y gases lacrimógenos, provocando heridas a una docena de personas.
«Lamento lo sucedido hoy. Un grupo de 200 individuos se presentó frente a la Municipalidad con claras intencionalidades políticas. En menos de 20 minutos se organizaron y apedrearon a los efectivos policiales que estaban custodiando los ingresos al Palacio», señaló el jefe comunal del PRO en conferencia de prensa.
La protesta se produjo en el marco de la tensión que se generó en el municipio a partir de la decisión del jefe comunal de Cambiemos de revisar unos 4.500 contratos que vencieron el 31 de diciembre, de los cuales se les daría continuidad a unos 2 mil, según trascendió.
Garro advirtió que «lo que se vivió en la Municipalidad no tiene que ver con trabajadores que vinieron a reclamar pacíficamente», y se centró sobre los que «vinieron a buscar incidentes, con una clara intencionalidad política», aunque anunció que recibiría a una delegación de los despedidos para buscar alguna solución al conflicto.
A través de las redes sociales, el intendente difundió imágenes de personas arrojando piedras, que no serían empleados del municipio, para dar a conocer los «rostros de los que incentivaron estos disturbios».
Al respecto, el dirigente indicó que «son punteros de la vieja política» a quienes «no se los ve preocupados por su continuidad laboral», y advirtió: «Los platenses pidieron un cambio, están cansados de los aprietes de la vieja política. De estos tipos que hace 25 años gobiernan la ciudad». «Pelear contra estas estructuras políticas no es gratis, estos ataques son la respuesta que nos envían», consideró Garro, quien además justificó la cesantía de empleados: «Tomamos una decisión política, el 31 de diciembre decidimos no renovar los contratos de puestos políticos y empleados de papel; la ley nos ampara».
La protesta se produjo en el marco de la tensión que se generó en el municipio a partir de la decisión del jefe comunal de Cambiemos de revisar unos 4.500 contratos.