El entrenador de Boca Juniors, Hugo Ibarra, se marchó con preocupación por la irregularidad del equipo y su falta de juego en la derrota del domingo por la noche ante Banfield, lo que provocará una revisión sobre el esquema para recibir a Instituto de Córdoba el domingo próximo en la octava fecha de la Liga Profesional.
BUENOS AIRES (NA).- Si bien buscó minimizar los efectos de la caída («esta vez nos tocó perder, tenemos que seguir mirando para adelante, falta mucho todavía», dijo), las sensaciones entregadas por sus dirigidos en el Florencio Sola lo llevarán a un replanteo para no perder el rumbo en el campeonato.
Voceros del cuerpo técnico le confirmaron a Télam que hay malestar por el bajo nivel de algunos jugadores importantes y que es concreta la posibilidad de volver a utilizar el módulo táctico 4-4-2 en busca de solidez colectiva.
Esta decisión iría en contrario a la confianza que demostró el formoseño en la rueda de prensa tras las práctica del viernes pasado cuando aseguró: «Acá no hay misterios, contra Banfield voy con el mismo equipo que con Defensa, confío en los mismos jugadores».
El respaldo a la formación, dispuesta en un 4-2-3-1 o un 4-3-3, según momentos del juego, quedó sepultada por uno de los rendimientos más bajos de su ciclo. Boca mostró una alarmante carencia de juego como le pasó en la derrota ante Talleres y en el empate con Defensa y Justicia, especialmente en el primer tiempo.
La baja de los rendimientos es lo que desvela al entrenador, a su cuerpo técnico y al Consejo de Fútbol liderado por Juan Román Riquelme. El caso más emblemático es del capitán Guillermo «Pol» Fernández.
Con Medina y Exequiel Fernández, otro de los cambios al comenzar la parte final, Boca tuvo otra dinámica y pudo explotar la velocidad de Luca Langoni en el ataque.
El buen ingreso de Equi Fernández pone en duda la permanencia de Alan Varela en el equipo. Hasta el momento, las veces que jugaron juntos no rindieron bien y cada vez que el ex Tigre se paró en el medio de la cancha mostró diferencias con un Varela que está lejos del buen nivel de la temporada pasada.
Otros rendimientos en baja que preocupan a Boca son el paraguayo Bruno Valdez y los colombianos Frank Fabra y Sebastián Villa.
En la mira de Boca viene ahora el compromiso ante Instituto, el próximo domingo de local. El sábado 25 enfrentará a Olimpo de Bahía Blanca por los 32avos de la Copa Argentina en el Chaco.
Para este partido no estarán los convocados a los seleccionados nacionales: Luis Advíncula (Perú), Fabra, Romero, Valdez y Norberto Briasco (Armenia).
El plantel «xeneize» regresará hoy a los los entrenamientos desde las 9:00 en su predio deportivo de la localidad de Ezeiza.