El oficialismo instala el debate sobre un asunto que estipula «la regulación del contrato de locación temporaria con fines turísticos en la República Argentina”.
BUENOS AIRES (NA).- En medio de la discusión sobre la reforma a la Ley de Alquileres el Senado debatirá este jueves el proyecto de ley motorizado por el Frente de Todos que busca regular los contratos de locación temporaria de inmuebles con fines turísticos.
En un plenario de las comisiones de Legislación general y de Turismo (que primero debe constituirse), la Cámara alta tratará desde las 11:30 el proyecto presentado en marzo pasado por la senadora santacruceña Ana María Ianni.
La iniciativa, muy similar a la presentada recientemente por la también kirchnerista Paula Penacca en la Cámara de Diputados, estipula «la regulación del contrato de locación temporaria con fines turísticos en la República Argentina».
Según el texto del proyecto, para que la locación de un inmueble sea considerada de alquiler temporario debe rentarse entre 1 y 90 días.
Estarán alcanzados «los propietarios o administradores que cuenten con poder y/o autorización correspondiente para comercializar inmuebles de forma temporaria, los huéspedes y toda persona que comercialice, publicite u ofrezca a través de cualquier medio viviendas de alquiler temporario para uso turístico».
La normativa propone la creación, en el ámbito del Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación -o el organismo ligado al turismo que lo reemplace en el futuro- del «Registro Nacional de Viviendas de Alquiler Turístico Temporario».
En uno de sus artículos la iniciativa dispone que «las plataformas digitales que ofrezcan, intermedien, y/o celebren contratos de locación temporarios con fines turísticos deberán: habilitar un campo en la plataforma digital para que el propietario informe el número de inscripción ante el registro de cada unidad; y proceder a la baja, retiro o suspensión de toda publicación que no posea el número de inscripción en el registro, previa notificación fehaciente al propietario o administrador de la unidad en alquiler».
Sin votos necesarios
Luego de que el martes se inaugurara el debate sobre la reforma de la Ley de Alquileres en el Senado, las novedades no son buenas para quienes alientan la aprobación de la media sanción venida en revisión de la Cámara de Diputados, donde Juntos por el Cambio logró una mayoría ajustada con la ayuda de fuerzas minoritarias de la oposición.
A la consabida postura que el Frente de Todos explicitó este martes en el plenario de las comisiones de Legislación General y Presupuesto, donde manifestó su desacuerdo con varios de los puntos que propone la oposición, este miércoles se sumó el posicionamiento de Unidad Federal que ocultó sus cartas pero este miércoles trascendió que presentará su propia iniciativa.
De esta manera, se disipan las chances de que Juntos por el Cambio consiga los 37 votos que hace falta para aprobar la iniciativa venida de Diputados.
Este empantanamiento de la reforma se produce en el peor contexto posible, ya que en la última semana miles de propiedades para vivienda se retiraron provisoriamente del mercado de alquileres luego de la media sanción de la Cámara baja, a la espera de que el Senado resuelva si convalida un nuevo marco normativo.
En total, la principal coalición opositora cuenta con 33 miembros y hasta el momento sólo se aseguró el acompañamiento del senador rionegrino Alberto Weretilneck, por lo que le siguen faltando tres voluntades para completar el consenso que necesita en pos de convertir en ley la iniciativa.
El proyecto propone reducir a dos años la duración de los contratos, con indexación cuatrimestral de los precios (hasta tres actualizaciones por año) y deja liberado al acuerdo entre las partes el parámetro que se tome para efectuar esos ajustes, pudiendo elegir a tales efectos el índice de precios al consumidor (IPC), el índice de precios mayoristas (IPM) y/o el índice de salarios (IS), elaborados por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), o una combinación de dichos índices.
Este último aspecto es resistido por Unidad Federal que advierte que no fijar como de obligatorio cumplimiento ningún criterio para la actualización de los precios de los alquileres daría pie a imposiciones arbitrarias por parte de los propietarios, que así tendrían margen para fijar las reglas y condiciones de los contratos, en detrimento de los inquilinos.
Dictamen rechazado
El dictamen del Frente de Todos, que fue rechazado en el recinto de Diputados, mantenía los tres años de plazo de los contratos que establece la normativa vigente, así como la indexación anual en base a una combinación de los indicadores que miden la evolución de los precios y los salarios.
La diferencia con la normativa vigente es que agrega un capítulo sobre beneficios fiscales para locadores, de manera tal de revertir la contracción de la oferta de alquileres.
Uno de los puntos que el oficialismo no está dispuesto a negociar tiene que ver con los tres años de duración de los contratos.
Consideran que volver a los dos años de plazo solo ayudaría a generar inestabilidad en las familias de inquilinos impidiéndoles la posibilidad de desarrollar sus proyectos de vida.