La embarcación de lujo arribó ayer a primera hora a la Bahía Ushuaia. Por su calado quedó fondeada en rada y sus pasajeros descendieron en botes salvavidas. Es el crucero más grande que visitará la capital fueguina en la presente temporada. Mide 345 metros y transporta más de 2600 pasajeros. El navío no visitaba Ushuaia desde el 2006.
USHUAIA.- La capital fueguina reafirmó ayer su buena temporada turística en materia de cruceros con el arribo del «Queen Mary II», la embarcación de lujo más grande que visitará Ushuaia durante la presente temporada.
El crucero llegó a primeras horas de la mañana y quedó fondeado en rada en la Bahía, a unos mil quinientos metros de la costa. Sus 2600 pasajeros descendieron en tender (botes salvavidas) a la ciudad y aprovecharon para realizar las excursiones y disfrutar de la gastronomía local.
Además se pudo observar una multitud de personas de la tercera edad que ingresaron a comercios céntricos para adquirir souvenirs que hacen reseña a la ciudad más austral del mundo.
Asimismo, los colectivos de las operadoras locales estaban aguardando en el estacionamiento de la doble Maipú, para trasladarlos hasta el Parque Nacional Tierra del Fuego. Otros cruceristas desistieron de las excursiones y aprovecharon para visitar el Museo del Fin Del Mundo que se encuentra en Maipú al 100.
Además el arribo del «Queen Mary II» coincidió con el amarre del Seabourn Quest y el Minerva; este último zarpó ayer en horas del mediodía.
Características de la embarcación
El Queen Mary II es puro lujo por donde se lo mire. Tiene 1.310 habitaciones, una capacidad de 2.620 pasajeros, 10 restaurantes, galerías de compras con productos de marcas famosas, cinco piscinas y un “spa”. También cuenta con dos simuladores de golf, cancha de padel y de basquet y un gran gimnasio, el salón de baile más grande, la biblioteca más amplia y el primer planetario a bordo.
El navío, cuya tripulación es de 1.253 personas -una por cada dos pasajeros- pesa 151.400 toneladas y mide 345 metros de eslora, 41 de manga, 8,6 de calado y 72 de altura desde la quilla a la chimenea, de los cuales 62 metros sobresalen del agua. Tiene 14 cubiertas, 1.310 habitaciones y lujosas suites de 290 metros cuadros, en dos pisos con ascensor, y en su construcción se invirtieron 800 millones de dólares, según datos de la empresa.
El QM2 cuenta con “una gran combinación de tecnología y poder” que lo impulsa “a velocidades de más de 30 nudos” (unos 63 kilómetros por hora), y está equipado “con una avanzada planta ecológica con suministro eléctrico generado por cuatro motores diesel y dos turbinas de gas”, detallaron.
Las turbinas están situadas debajo y detrás de las chimeneas y se utilizan para alcanzar mayor velocidad, mientras los cuatro motores diesel se ubican “muy abajo en el barco, debido a su peso y tamaño”, cada uno de 12,5 metros de largo, 4,4 de ancho, 5,5 de alto y 217 toneladas de peso.