El sombrío panorama se incluye en un informe del equipo técnico de la Secretaría de Protección Civil y Abordaje Integral de Emergencias y Catástrofes del Ministerio de Seguridad de la Nación, el cual fue entregado en Casa de Gobierno a fines de enero.
BUENOS AIRES (NA).- Las autoridades esperan para el próximo invierno inundaciones diez veces mayores a la que afectó al Litoral este verano si se cumplen los peores pronósticos en torno al fenómeno de El Niño, lo que podría acarrear la evacuación de más de 100 mil personas y que tres millones de hectáreas queden bajo el agua en seis provincias.
El sombrío panorama se incluye en un informe del equipo técnico de la Secretaría de Protección Civil y Abordaje Integral de Emergencias y Catástrofes del Ministerio de Seguridad de la Nación, el cual fue entregado en Casa de Gobierno a fines de enero pasado.
El informe fue entregado durante la primera reunión del gabinete nacional del Sistema Federal de Emergencias (Sifem) desde su creación, hace 17 años.
Las lluvias y las crecidas que se esperan para julio son superiores a la última inundación, que afectaron a 16.190 personas en el litoral.
Los especialistas evalúan inclusive la posibilidad de que la emergencia sea más grave que la de 1983, cuando 130 mil personas debieron ser evacuadas.
El fenómeno de El Niño, de acuerdo con el informe, «es uno de los tres más fuertes en los últimos 50 años, comparable a los ocurridos en 1983 y 1998».
«Se prevé que nuestro territorio se vea afectado hasta julio de 2016, con un pico máximo de afectación entre marzo y abril», se alertó en el informe.
El informe fue presentado ante unos 50 organismos que integran el Sifem, entre los que se encuentran ministerios, instituciones de seguridad, Fuerzas Armadas e institutos técnicos y científicos.
También se acordó la conformación de un fondo de 250 millones de pesos para atender las emergencias por venir.
Emilio Renda, secretario de Protección Civil y Abordaje Integral de Emergencias y Catástrofes, sostuvo que se puede estimar que que habrá entre 120.000 y 130.000 evacuados (más de 140.000 en el pico máximo de afectación), con una gran pérdida en la producción ganadera y cultivos en más de tres millones de hectáreas que quedarán bajo el agua».
Como dato alentador, el experto admitió que varias ciudades se han fortalecido en sus defensas, por lo que podrían aminorar las consecuencias.
El Niño-Oscilación del Sur es un fenómeno climático relacionado al calentamiento de las aguas del Pacífico oriental ecuatorial, en ciclos que se dan entre tres y ocho años, que en sus manifestaciones más intensas provoca estragos por intensas lluvias en distintos puntos de América del Sur y otros puntos del planeta, mientras que en otros se producen graves sequías.