El escritor y psicoanalista argentino escribió “La felicidad”. Cuáles son las claves que lo convierten en un suceso y por qué es un ensayo indispensable en esta época.
BUENOS AIRES (NA).- Desde el lanzamiento del libro “La felicidad”, el psicoanalista y escritor argentino Gabriel Rolón es el protagonista de los rankings de ventas. Hace siete meses que mantiene el primer puesto gracias al ensayo que indaga en uno de los temas más frecuentes de la sociedad contemporánea: ¿Cómo alcanzar la felicidad?
Con una tirada inicial de 40.000 ejemplares y una edición limitada con tapa dura, La felicidad cala hondo en el interés lector. La propuesta de Rolón parte de una base incómoda: lejos de brindar recetas mágicas, sugiere abandonar los clichés y preconceptos comunes acerca del ser feliz.
¿Encontramos la felicidad en el pasado? ¿Cuál es la relación entre el futuro, la esperanza y la felicidad? ¿Existe un espacio, un lugar donde habita la felicidad? ¿Se puede buscar y encontrar? ¿Depende de nosotros? ¿Podemos pensar que la felicidad viene del éxito?, son algunas preguntas que esboza el best seller argentino indiscutido. Y, en última instancia: ¿El ser humano puede alcanzar la felicidad?
“Pensar en la felicidad tal vez sea pensar en un vacío, en un borde, en un espacio intermitente que de pronto se percibe y luego se va, quién sabe a dónde. Como el Inconsciente”, escribe Rolón en el prólogo del libro.
En las más de 390 páginas, el autor de grandes sucesos editoriales como Historias de diván, Palabras cruzadas, El duelo recorre campos como el psicoanálisis, la filosofía, la literatura y el arte, ofreciendo una guía intelectual que abarca desde la mitología clásica hasta figuras contemporáneas como el filósofo coreano Byung-Chul Han.
Además recurre a las ideas y conceptos clave de Freud y Lacan, Bertrand Russell, Humberto Eco y Comte-Sponville; la literatura de Borges, Cortázar, Franz Kafka y Alejandro Dolina; las reflexiones y aportes de Nietzsche, Schopenhauer, Voltaire y Einstein; los escritos de Ana Frank, entre otros. Pero ese no es el único recurso que Rolón toma para este libro. También echa mano a anécdotas personales y ejemplos de consultas recurrentes en el diván.
“La felicidad -dice Rolón- es difícil de detectar porque se esconde en detalles que a veces no podemos percibir”. Esta es una de las frases que sacuden al lector y lo llevan a pensar críticamente sobre las nociones actuales de la felicidad y las trampas del pensamiento moderno.
Rolón utiliza su estilo característico -cercano, íntimo y de divulgación- que atrae a su público desde décadas para escribir un ensayo esperado sobre una de las palabras más escuchadas del último tiempo.
La felicidad incorpora una noción interesante que recorre el libro: la de “faltacidad”, un término que acuña para describir una felicidad que incorpora las ausencias y faltas en la vida de una persona.
“Quizá debamos abandonar lo que creemos que nos hace felices para ser nosotros mismos. También es posible que aprendamos a valorar algunas cosas que, por tenerlas cerca, no llegamos a apreciar”, apunta Rolón. Cómo hacerlo en la época que nos atraviesa es la cuestión.
La época de la desmesura
En La felicidad, Rolón pone el foco en el mundo actual. El mundo globalizado borra las diferencias e impone sus desafíos y se mete de lleno en las redes sociales. “No solo habitamos la época de la tecnología sino de la desmesura”, dice para referirse a la exigencia de alcanzar todo: el éxito, la salud, la fama, el poder. “Un pensamiento mágico”, agrega el autor.
Rolón también desarma los imperativos de las órdenes respecto a la felicidad como las famosas frases “¡Ama!”, “¡Ríe!”, “¡Disfruta!” y advierte que se trata de mandatos condenados al fracaso. Y va más allá cuando dice: “Es asombrosa la crueldad de la época que habitamos. Una época en la que la felicidad ha dejado de ser una opción para ser una obsesión y una herramienta de control”.
El psicoanalista señala que se trata de una “calma engañosa”, algo así como lo que The Wall definía en su canción como Comfortably Numb, una cómoda nube similar a la anestesia.
“La época que vivimos nos invita a un egoísmo desmesurado, y la vida se nos pasa mientras estamos obsesionados por alcanzar una ‘felicidad plena’ que es imposible y el éxito para cumplir con las exigencias del mundo”, reflexiona Rolón y problematiza en cómo la cultura actual nos empuja hacia el disfrute instantáneo, desviando la mirada del trabajo consciente y profundo que requiere la construcción de la felicidad.
Le felicidad también es un ensayo que piensa el derecho legítimo a luchar por la felicidad en contraposición a la obligación de disfrutar impuesta por la sociedad de consumo.
En este sentido, Rolón también aborda la influencia negativa de ciertos “falsos profetas” que ofrecen una idea de la felicidad como un producto disponible en el mercado. Según el autor, la cultura actual tiende a evitar la tristeza porque las personas felices consumen más, lo que contrasta con quienes prefieren resguardarse en momentos de tristeza.
Se puede definir a La felicidad por lo que no es: una guía definitiva para alcanzar la felicidad. Se trata, más bien, de un recurso para comprender y manejar sus complejidades de un término profundo, que escapa a las definiciones.