El Gobierno anunció que «modificará» la resolución 187 publicada en el Boletín Oficial y luego de la controversia que generó el uso de terminología discriminatoria para referirse a personas con problemas de salud mental, y notificó que los responsables del «error» fueron desplazados.
BUENOS AIRES (NA).- En el Anexo I del documento de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) se usaron los términos «idiota», «imbécil», «débil mental» y «retardado» para caracterizar a quienes sufren problemas mentales, lo que causó rechazo en las organizaciones que velan por los derechos de las personas con discapacidad.
Tras la polémica por el uso de ese tipo de lenguaje, desde la ANDIS aclararon en un comunicado que fue un «error» haber utilizado esa terminología y sostuvieron que no hubo «ninguna intención discriminatoria».
El director Ejecutivo de ese organismo, Diego Orlando Spagnuolo, confirmó desde las redes sociales que «las personas responsables por lo que pasó ya fueron desvinculadas».
Anteriormente, el funcionario había indicado que «se trató de un error derivado del uso de conceptos pertenecientes a una terminología obsoleta», explicó el organismo, y añadió que ese tipo de caracterizaciones fueron utilizadas en el pasado en medicina psiquiátrica, aunque se eliminaron por su carácter peyorativo.
A pesar de la modificación, el organismo sostuvo que la «corrección no modificará el baremo ni sus criterios de evaluación».
La resolución, que había generado controversia, tiene como objetivo establecer criterios para evaluar a las personas que cobran pensiones por invalidez.