BUENOS AIRES (NA).- El oficialismo y la oposición, con la excepción del trotskismo, firmaron ayer un dictamen unificado del proyecto de ley de Acceso a la Información Pública en un plenario de comisiones, con el objetivo de que sea aprobado por el pleno del cuerpo en la sesión del miércoles 4 de mayo.
En un debate que duró poco más de una hora, los diputados resaltaron la importancia de contar con una herramienta orientada a la transparencia en la administración pública y, aunque hubo firmas en disidencia tanto de oficialistas, como Elisa Carrió, como de opositores, fueron sólo sobre aspectos técnicos del texto.
«El eje central es que la mayor cantidad de información que posee el Estado sea pública y que las excepciones sean lo más restringidas posibles», dijo el macrista Pablo Tonelli, presidente de la comisión de Asuntos Constitucionales, que sesionó junto a la de Presupuesto y Hacienda, que conduce Luciano Laspina (PRO).
El proyecto de ley, que de ser aprobado dentro de dos semanas será girado al Senado, se basa en una serie de principios entre los cuales se destacan que «la información debe publicarse de forma completa, con el mayor nivel de desagregación posible y por la mayor cantidad de medios disponibles» y que «se debe entregar información a todas las personas que lo soliciten».
También, que «la información debe ser publicada con la máxima celeridad» y que «el acceso a la información debe ser gratuito».
La iniciativa viene a reemplazar al decreto 1172 dictado por el presidente Néstor Kirchner en 2003, que seguirá vigente durante un año después de sancionada esta ley para que los distintos sujetos obligados a dar información puedan «adaptarse» a la norma.