Más de tres mil personas se convocaron en la “Plaza de las Américas”, en Río Grande, para manifestar su rechazo al aumento en la tarifa del gas decidida por el Gobierno Nacional. Aunque la protesta fue organizada por diferentes gremios, la participación de los vecinos superó todas las expectativas.
RIO GRANDE.- Ayer, por casi dos horas, más de tres mil personas se manifestaron en la “Plaza de las Américas” de esta ciudad, en rechazo a la suba del gas en Tierra del Fuego.
Si bien la convocatoria fue organizada por distintos gremios, en la manifestación fue notoria la presencia de vecinos, quienes se sumaron con frazadas y carteles a pesar de la baja temperatura que se registraba hacia el mediodía.
El diputado nacional y secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Oscar Martínez, fue el orador que cerró la convocatoria, con fuertes críticas al Gobierno Nacional, aunque sin dejar de mencionar el desalojo policial del acampe gremial en Ushuaia.
“Hoy hemos salido a la calle y aquí está el pueblo de Tierra del Fuego. Nuestra convocatoria no es propiedad de nadie, es un logro de todos los que se comprometen para hacerse escuchar”, remarcó el dirigente metalúrgico.
Por su parte, el secretario gremial del Sindicato de Petroleros Jerárquicos, Moisés Solorza, instó a los fueguinos a “elevar las banderas de reclamo para defender lo que nos pertenece”, remarcando que el gas es un recurso natural de Tierra del Fuego.
“Sabemos lo que cuesta extraer el recurso de esta tierra que nos pertenece, sabemos lo que significa salir a las 4 de la mañana a los campamentos petroleros, y queremos decirle al Ministro Rogelio Frigerio que no vamos a permitir que nos trate peyorativamente”, enfatizó.
En ese sentido, Solorza le recordó al funcionario nacional “que Tierra del Fuego se siente orgullosa de aportar el 20 por ciento de la matriz energética nacional”, detallando que “producimos 20 millones de metros cúbicos de gas por día”, de los cuales “necesitamos simplemente 3 millones para desarrollar nuestras actividades en la provincia”.
“Tener una tarifa diferencial no es un privilegio, es un derecho y una necesidad que tenemos en Tierra del Fuego”, concluyó.
En la manifestación se dio a conocer un documento con los fundamentos del rechazo al incremento en la tarifa de gas, que será presentado a Rogelio Frigerio en una reunión pautada para mañana con representantes fueguinos.
Todos contra Frigerio
Numerosos carteles y hasta un maniquí fueron algunas de las demostraciones de repudio al ministro del Interior de la Nación, Rogelio Frigerio, durante la movilización convocada ayer por la suba del gas.
“Teníamos -10° en las provincias del sur y la gente estaba en remera en la casa o abría las ventanas de tanta calefacción que tenían porque era gratis prácticamente el servicio público». Esta frase del ministro del Interior, Rogelio Frigerio, caló profundo en los fueguinos.
Y así lo hicieron notar en la movilización los vecinos que se sumaron a la convocatoria y tuvieron su oportunidad de plasmar su enojo con el funcionario macrista.
Pedido de la Iglesia
Los obispos de la Región Patagonia-Comahue enviaron ayer una carta a los ministros Juan José Aranguren, de Energía, y Rogelio Frigerio, del Interior, en la que transmitieron su intensa preocupación por los aumentos de las tarifas de gas y electricidad en la zona y pidieron su reconsideración.
Se trata, para los prelados de incrementos “desmesurados” en una región que comprende a las provincias del Chubut, Neuquén, Río Negro, Santa Cruz y Tierra del Fuego.
En la misiva manifestaron el “reclamo doloroso” de los vecinos patagónicos, sobre todo de los más pobres y solicitaron la reconsideración de las medidas tomadas a fin de evitar “situaciones insostenibles”.
“No nos cabe duda son aumentos que en algún momento debían darse, particularmente en los grandes centros urbanos que contaban con servicios subsidiados por el Estado, pero lamentamos que estos aumentos no hayan sido hechos gradualmente, sobre todo teniendo en cuenta que el invierno no es benévolo en la Patagonia”, explicaron los obispos patagónicos.
También resaltaron que “en las provincias más australes del país se prolonga durante todo el año. Por eso se necesita imperiosamente gas y electricidad”, según consignó la agencia AICA.
Los dignatarios de la Iglesia católica destacaron que “el reclamo doloroso de nuestra gente” llega a diario a través de sacerdotes, agentes de Pastoral y Cáritas parroquiales que “se sienten impotentes frente a las angustias de los más pobres y necesitados y de tantas Pymes, que ven peligrar su continuidad comercial con la consiguiente pérdida de empleos que ello significaría”.
El texto lleva la firma de los obispos Virginio Bressanelli (Neuquén), Fernando Croxatto (auxiliar de Comodoro Rivadavia), Marcelo Cuenca (Alto Valle del Río Negro), Juan José Chaparro (San Carlos de Bariloche), Miguel Ángel D’Annibale (Río Gallegos) y Joaquín Gimeno Lahoz (Comodoro Rivadavia).
También suscriben Esteban Laxague SDB (Viedma), José Slaby (Esquel), Fernando Bargalló (emérito de Merlo-Moreno), Marcelo Melani (emérito de Neuquén), Néstor Navarro y José Pedro Pozzi (eméritos de Alto Valle del Río Negro).
“Señores ministros: con ánimo confiado nos dirigimos a ustedes a fin de hacerles llegar el pedido de reconsideración de las medidas tomadas a fin de evitar situaciones insostenibles que generan angustia en las familias e inclusive en escuelas y obras de promoción social de muy escasos recursos, injustamente gravadas por un peso insoportable”, expresaron este martes.
Suministro normalizado
En otro orden, el Gobierno nacional indicó ayer que “tiende hacia la normalización el suministro de gas en todo el país”, luego de que se le pidiera a las industrias dejar de utilizar el servicio para que los hogares no se vieran afectados.
El Ministerio de Energía sostuvo, mediante un comunicado, que “como consecuencia de las intensas negociaciones para solucionar el conflicto gremial en el sector petrolero y la mejora de las condiciones climáticas, el Comité de Emergencia convocado por ENARGAS tomó la decisión de flexibilizar la instrucción de corte en la industria y llevarla al nivel de consumo mínimo técnico”.
El ministerio decidió también “mantener el suministro sin cortes a las estaciones de GNC” la decisión de llevar el nivel de consumo de gas a un mínimo técnico alcanza también a las usinas eléctricas.
En un comunicado el ministerio informó que ayer “se importaron en promedio 1.800 MW de Brasil y Uruguay” para hacer frente a la restricción energética.
Señaló que las mejoras climáticas “permitirán que en las primeras horas de mañana pueda amarrar un barco de GNL en el puerto de Bahía Blanca” para aumentar el aprovisionamiento del fluido a la red nacional.
El comunicado oficial promete también que “en la medida que se normalice la inyección gas al sistema argentino, se irán liberando consumos en todo el país”.
La cartera de Energía había pedido ayer a las empresas que no utilizaran gas en sus líneas de producción y había adelantado la posibilidad de que se cortara el suministro de GNC (Gas Natural Comprimido) en todo el país.
Sin declarar la emergencia energética, el ministerio había fundamentado esas medidas, sosteniendo que se aplicaban para para preservar el abastecimiento a los hogares, hospitales y escuelas.
El ministerio también le había pedido a las centrales térmicas de generación eléctrica restringir al mínimo posible el suministro de gas a para tratar de mantener el sistema eléctrico.
Hoy esa medida también fue flexibilizada y le permitirá mañana a las centrales utilizar el gas hasta un mínimo técnico.
Las medidas de excepción habían sido fundamentadas en los problemas ocasionados en el abastecimiento de gas por el que desarrollaban los trabajadores petroleros del sur del país y a las condiciones climáticas, que habían impedido el abastecimiento del fluido a través de los barcos abastecedores de gas.