OAKLAND, EEUU (AFP).– Con 22 puntos del armador Stephen Curry, los Golden State Warriors abrieron ayer su serie semifinal de la Conferencia Oeste de la NBA con un cómodo triunfo de 101-86 sobre los Memphis Grizzlies, para poner el tope 1-0 a su favor.
Curry también aportó al triunfo siete asistencias y sus compañeros Kley Thompson y Draymond Green lo hicieron con 18 y 16 tantos, respectivamente.
El segundo partido de esta serie, al mejor de siete encuentros, será el martes también en Oakland.
El pívot español Marc Gasol terminó con 21 puntos y nueve rebotes, y Zach Randolph con 20 tantos y nueve capturas por Memphis, al que mucha falta le hizo su armador Mike Conley.
Conley estuvo sentado en el banco con su ojo izquierdo todavía hinchado, ya que continúa recuperándose de una cirugía para reparar huesos rotos en la cara. No está definido si Conley volverá a jugar en los próximos partidos.
Curry, favorito para ganar el premio MVP (Jugador Más Valioso) de la temporada regular, tuvo un comienzo lento pero a medida que avanzaba el partido fue tomando su nivel habitual.
Los Warriors dispararon para 50,6% de efectividad en tiros de campo, incluido un 46,4% desde la línea de tres puntos (13 de 28). En tanto, Memphis lo hizo para un 45,2% en tiros de campo, pero sólo efectivizó tres de 12 triples (25%).
Los Warriors tuvieron ocho días de descanso luego de barrer rápido en la primera ronda a los New Orleans Pelicans.
Curry empujó el ritmo de principio a fin, y los Grizzlies nunca pudieron neutralizar a los Warriors.
Los Grizzlies se habían apoyado en el ataque físico de sus astros Randolph y Gasol para cortar un déficit de siete puntos en la primera parte, pero Curry respondió con un par de triples para llevar a su equipo al descanso intermedio con clara ventaja de 61-52.
Los Grizzlies, que están en las semifinales de Conferencia por tercera vez en cinco años, se vieron perdidos cuando el australiano Andrew Bogut y Green se metieron en problemas de faltas y tuvieron que irse a la banca en el último cuarto.
