BUENOS AIRES (NA).- La venta de autos usados volvió a recuperarse en abril, con un alza del 13,7%, y si bien se está comparando con un 2014 muy malo, el sector considera que lo peor de la crisis ya pasó, aunque se queja por la «presión impositiva» en la Ciudad de Buenos Aires y las provincias.
Según reportó la Cámara del Comercio Automotor (CCA), en abril se transfirieron 143.644 unidades, lo que representó un crecimiento del 13,75% comparado con igual mes del año pasado (126.275 unidades).
En los cuatro primeros meses del año de transfirieron 547.313 vehículos, casi el mismo volumen de 2014 (549.917 unidades). Si se compara abril con marzo (137.287 vehículos), la suba alcanza al 4,63%, indicó la entidad que engloba a los concesionarios.
Alberto Príncipe, presidente de la Cámara del Comercio Automotor, explicó que «la sorpresa que dio el sector con la suba del 12,6% en marzo, se convirtió en realidad durante abril, con una venta de 143.644 vehículos usados que significó un crecimiento del 13,75 por ciento».
«Con estos números debemos decir que hay continuidad en el sector. El mercado comenzó a reaccionar nuevamente. Vislumbramos un segundo semestre del año con crecimiento con respecto al año pasado en el volumen de ventas», señaló.
Príncipe sostuvo que «el mercado entendió la oportunidad de compra que se le ofrece, dado el precio conveniente que tienen todos los segmentos de usados en este momento, a pesar de la presión impositiva y las tablas de valores distorsionadas cobradas por los distintos gobiernos, tanto de la Ciudad de Buenos Aires como provinciales, con una voracidad nunca vista y alejada totalmente de la realidad del mercado». Advirtió que «esta demanda va a traer aparejados aumentos paulatinos de precios».
