La dirigencia del Moto Club Río Grande ya está trabajando para lo que será la próxima edición del enduro que estadísticamente es el más antiguo de nuestro país. Más allá de la labor de campo que ya comenzó a realizarse, paralelamente se llevan a cabo gestiones para un diagrama en el cual los organizadores piensan en hacerla del Destacamento José Menéndez hasta el Destacamento de ingreso a la ciudad del Fin del Mundo. El presidente de la institución más antigua del motociclismo fueguino se reunió con el Intendente de la ciudad de Ushuaia, Walter Vuoto, quien ya se comprometió a colaborar en el desarrollo del enduro más esperado por los fueguinos.
RÍO GRANDE.- Si bien hace una semana la actividad del motociclismo llegó a su fin, el club más antiguo del motociclismo en Tierra del Fuego ya activó los trabajos de cara a la realización de lo que será la XXXIV Edición de la Vuelta a la Tierra del Fuego, la cual está tentativamente diagramada para los días 23, 24 y 25 de marzo del 2017.
Esta será la 2º organización por parte de la nueva Comisión Directiva que preside el licenciado en Alto Rendimiento Deportivo Germán Núñez. Este año, él y su grupo funcionaron como subcomisión de trabajo de la competencia, de común acuerdo con la comisión saliente quienes estuvieron por el período de cuatro años frente a la institución mostrando sobre el final un desgaste natural frente a la misma. La Vuelta necesitaba sangre nueva y dispuesta a aplicarle una vuelta de rosca, por eso Núñez y compañía se hicieron cargo de la misma con un compromiso de darle al motociclismo un período de aporte y trabajo. Posterior a esa anecdótica edición, se hicieron cargo por el lapso de dos años como la nueva comisión, la cual se puso al día con toda la parte administrativa ante la Inspección General de Justicia (IGJ)
En la edición 2016 se pudieron ver trabajos de campo en el sector que comprende desde el Destacamento José Menéndez hacia Tolhuin, donde se estaqueó todo ese sector (100 km.) cambiando la huella que ya estaba instalada desde hace más de 15 años, cuando el enduro comenzó a transitar al costado de la Ruta Nacional N° 3. Aquí varias personas hicieron un gran aporte en cuanto las estacas y las cintas de color azul y rojo que delimitan el trazado de la competencia.
Otra gran obra y de muchos días de labor, fue la que se realizó en el sector que comprende La Reserva Aborigen y Aguas Blancas, allí se confeccionó una especie de picada con un intenso trabajo de varios integrantes del grupo, como así también de gente que desinteresadamente se sumó a la causa entendiendo que hay una causa muy esperada por los fueguinos conocida como Vuelta a la Tierra del Fuego. Prácticamente todos los fines de semana desde octubre a febrero llevó poder concluirla, con mucha mano de obra, esfuerzo, viajes hacia el sector, motosierras y limpieza del sendero para que la carrera tenga algo distinto.
Punto y aparte fue lo que se vivió previo a la carrera que revoluciona a Tierra del Fuego a lo ancho y a lo largo de nuestra provincia, en este caso algo que revolucionó también a nuestra provincia ante un reclamo reflejado en un piquete en el acceso a la ciudad del Fin del Mundo. Eso trajo aparejado inconvenientes por un lapso considerable a todos los habitantes de nuestra provincia quienes nada tenían que ver con la situación.
La misma también jugó en contra de la organización de los pilotos foráneos que viajaron para ser parte de la misma, en contra de una historia ininterrumpida desde 1984 con uno de los eventos deportivos de mayor trascendencia en Tierra del Fuego, en contra de los pioneros de esta carrera apasionante que crearon y que hoy nos permite la estadística que sea la más longeva de la Argentina, y en contra de todos los pilotos y familias que esperan ser parte de la historia motociclística que crece con el correr de los años.
Eso quedará en el recuerdo, en anécdotas de los pilotos ushuaienses que hicieron peripecias para salir como si estuvieran, tal cual titula una canción de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota: “Preso en mi ciudad”. Sin ellos y esa actitud no hubiera sido posible la realización cuando la carrera estaba suspendida durante un lapso de casi 24 horas. Los piqueteros y toda esa gente no veían más allá de sus reclamos y nunca tuvieron la mínima intención de poder colaborar positivamente para que el evento deportivo se haga, pero la pasión y la unión lo hicieron posible.
A pocos días de cerrar el 2016, este grupo de trabajo que supo salir adelante sobre la gran adversidad, ya piensa y actúa en función de la próxima edición. Tienen en mente llegar a la ciudad capital para que el recorrido sea completo con muchas tareas de campo en las cuales ya están inmersos.
Dentro de las gestiones alcanzadas por el presidente Germán Núñez, ya tuvo la posibilidad de ser recibido por el intendente de la ciudad de Ushuaia, Walter Vuoto, como así también de Guillermo Navarro, vicepresidente del Instituto Municipal de Deporte de la capital. Por su parte Vuoto se comprometió en un apoyo total al desarrollo de la misma, sabiendo que su ciudad será la anfitriona al finalizar la primera etapa. El Intendente capitalino sabe lo que genera la competencia en muchísimos aspectos, es por eso que no duda a la hora de ser el primero de los actores políticos en levantar la mano en el megaevento motociclístico.
Aparte de este recibimiento sumamente positivo, la comisión mantendrá una reunión con personal de Seguridad de la Provincia con el objetivo de comenzar a trabajar con las medidas correspondientes a la previa de la competencia. Aquí el lineamiento principal impulsado por el Moto Club Río Grande es respetar a quienes transitan la Ruta Nacional N°3, apuntando a todos los que en los meses de enero y febrero realizan trabajos en la hoja de ruta de la carrera. La reunión se concretará el próximo 28 de diciembre, a casi tres meses de la realización de la competencia.
Con el tiempo transcurrido a través de las ediciones, sabemos que los pilotos foráneos llegan desde muy lejos para ser parte de un enduro que es conocido en todo el país, y llegar endureando al Fin del Mundo es el objetivo de muchos de ellos, quienes al regresar venden a través del boca a boca los lugares por donde se corre y la atención cordial que es otra característica del fueguino.