BUENOS AIRES (NA).- La Confederación Argentina de Básquetbol (CABB) y la Federación Uruguaya de Basquet anunciaron ayer oficialmente su candidatura para organizar el Mundial de la especialidad en el año 2023.
En la presentación que se realizó en el CeNARD estuvieron presentes autoridades de la Federación uruguaya, como así también el presidente de la CABB, Fernando Susbielles, además del Ministro de Educación y Deportes, Esteban Bulllrich.
«Esta propuesta lo que busca es unirnos más como países hermanos. También el hecho de presentar una propuesta conjunta ante la Federación Mundial esperemos que sea valorada para poder organizar el torneo», expresó Bullrich en la conferencia de prensa.
La semana próxima, de manera formal, las federaciones de ambos países presentarán la candidatura para que se organice el torneo en la zona del Río de la Plata.
En octubre pasado, Argentina fue uno de los países que presentó una eventual candidatura para organizar la Copa del Mundo que proseguirá a China 2019. Otras de las naciones que mostraron interés en ser sede son Turquía, Serbia, Rusia, Polonia, Israel, Australia, Hong Kong, Japón y Filipinas.
Argentina organizó los Mundiales de 1950 (donde fue campeón por única vez en la historia, disputado de manera íntegra en el Luna Park) y el de 1990, que se realizó con varias sedes en distintas provincias y en el que terminó sexto.
En febrero próximo la Federación Internacional de Básquetbol (FIBA) anunciará qué candidatos terminarán siendo los que disputen, a fin de año, la posibilidad de quedarse con el Mundial del 2023.
«Argentina tiene una gran historia y su unión con Uruguay fortalece la candidatura. Se lo puede conceptualizar como un Mundial que tiene un mismo ámbito geográfico, el rioplatense», afirmó Susbielles durante la presentación en la que también estuvieron Ricardo Vairo (presidente de la confederación
uruguaya) y Fernando Cáceres (secretario de Deportes de Uruguay).
Precisamente Vairo agradeció a la CABB por la propuesta y «por pensar que Uruguay le puede dar un valor agregado», y agregó que «es cada vez más difícil para un país chico como nosotros hacer algo así, pero es una alternativa realizarlo de manera conjunta».