Un testigo clave señaló al acusado como el autor del disparo que mató a Sergio Quiróz

RIO GRANDE.- Ayer, en el inicio del juicio oral a Roberto Calderón por el homicidio del joven Sergio Quiróz, de 19 años de edad, él accedió accedió a prestar declarar indagatoria ante el Tribunal y señaló que esa noche la pasó en un asado con amigos y que nunca estuvo en el lugar.

Pero, luego declaró el principal testigo en la causa, un joven que acompañaba a la víctima, quien, a pesar de ingresar en su testimonio en muchas contradicciones, fue contundente al señalar hacia el banquillo del acusado cuando se le preguntó si sabía quién había realizado el disparo mortal.
El hecho

El crimen ocurrió el 17 de junio del año pasado en el frente del edificio de calle Goytisolo al 500 de Chacra II, donde Sergio Quiróz -esa madrugada- llegó junto a su acompañante, un joven de por entonces 17 años, con la intención de cambiar una campera robada por dinero o cocaína.

Allí se produjo el enfrentamiento con Roberto Raúl Calderón, quien siguió a ambos jóvenes hasta el exterior del edificio, donde se le acusa de haber disparado a la cabeza de Quiróz, quien perdió la vida como consecuencia de la herida provocada con el arma de fuego.

Calderón en su indagatoria señaló que esa noche estuvo en un “asado con amigos” y que luego fue a la casa de su novia a quien no encontró, agregando que tras ello fue a un pool céntrico. Finalmente en su relato señaló que se fue a la casa de unos amigos en Chacra XIII.

En ese sentido indicó que por problema con uno de sus hermanos “hacía seis meses que no se hablaban” y por ello no residía permanentemente en el lugar, respondiendo al período de búsqueda en que estuvo prófugo que “no sabía que lo estaban buscando”.

 

Testimonio

Tras la indagatoria del acusado, se dio lugar al testimonio más importante de esta causa, el de un joven de apellido Vallejos Roth, quien en ese entonces tenía 17 años de edad y acompañaba a la víctima la madrugada del día en que ocurrió el trágico hecho.

En su declaración aseguró que estuvieron tomando bebidas alcohólicas en la casa de Shalom Quiróz, mujer que cumple prisión domiciliaria dictada por el propio Tribunal de Juicio (lo cual dejó en evidencia una vez más que infringió las pautas de conducta).

En medio de numerosas contradicciones con lo que había declarado en la instrucción de la causa, Vallejos Roth indicó al Tribunal que se retiraron de la casa de Shalom, abordaron un remís y compraron más bebidas alcohólicas en un lugar de venta clandestina y luego visitaron domicilios de distintos personajes vinculados al mundo de la droga.

En su declaración durante la instrucción de la causa, el testigo señaló que Quiróz fue “a ver al Chino Calderón”, hermano del imputado, a fin de “vender la campera para cambiarla por droga o cocaína”, haciendo referencia a una prenda de vestir que la víctima había robado la noche anterior

El testigo señaló que Roberto Calderón salió muy exaltado y le pegó un golpe a Quiróz, asegurando que luego entró a la casa dejando la puerta abierta, llevándolo ello a presumir que entró por un arma.

Vallejos Roth señaló que bajó a Walter Quiróz hasta el exterior del edificio y que luego éste último intentó volver al edificio y que al no poder controlarlo decidió escapar del lugar, tras lo cual escuchó un disparo de arma de fuego, aclarando que no vio el momento en que se produjo la detonación.

Si bien el testigo no supo explicar cómo conoce a Roberto Calderón, o como lo identifica de sus demás hermanos, fue concluyente al señalar al imputado presente en la sala de juicio como el autor del crimen, al responder a una consulta formulada por el fiscal Eduardo Tepedino.

Concluida la testimonial de Vallejos Roth, el Tribunal de Juicio resolvió pasar a un cuarto intermedio para continuar con más testimoniales.

El acusado Roberto Calderón.