COMODORO RIVADAVIA.- Luego de que los muestreos nacionales realizados arrojaran resultados negativos en la Patagonia, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) declaró, mediante la Resolución N° 386/2017 publicada en el Boletín Oficial y que entrará en vigencia en 30 días a partir de su publicación, a la región como zona libre de anemia infecciosa equina (AIE).
El Senasa establece a partir de la normativa la vigilancia de la enfermedad, el procedimiento de saneamiento de establecimientos positivos a AIE, los requisitos para el ingreso y egreso, así como las características de la movilización de équidos dentro de la zona. En este sentido, se destaca principalmente que los equinos de deporte pueden trasladarse dentro de la zona sin realizar el diagnóstico de AIE.
Al respecto, el director nacional de Sanidad Animal del Senasa, Ricardo Maresca, subrayó que «el reconocimiento oficial de la Patagonia como zona libre de anemia infecciosa equina constituye un indudable progreso en la sanidad equina del país».
Para llegar a este logro Maresca resaltó «el rol destacable de los propietarios de equinos así como de los veterinarios asesores responsables ya que su conocimiento sobre la enfermedad y las medidas sanitarias preventivas aplicadas resultan trascendentes para preservar la zona libre, como así también mejorar el estatus sanitario en otras zonas endémicas del país».
La instauración de requisitos específicos para esta enfermedad -que registran y controlan los movimientos de équidos entre regiones con estatus sanitarios diferentes- es particularmente importante ya que el tránsito de animales es una de las principales causas de la difusión de enfermedades.
La zona beneficiada abarca el partido de Patagones de la provincia de Buenos Aires y las provincias de Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur.
A su vez, el Senasa apunta a regionalizar el país respecto del virus de la AIE como estrategia para el control y la erradicación de la enfermedad, por lo que promueve que los gobiernos provinciales profundicen y mejoren la situación sanitaria de los équidos mediante la aplicación de planes sanitarios diseñados de acuerdo a las características de cada región.