La mirada de un fueguino sobre la crisis en Cataluña

 

El doctor Jorge Rabassa es el único argentino miembro de la Academia de Ciencias de Cataluña. El científico aporta su mirada respecto del conflicto catalán, hoy en boca de todos debido a las gestiones que lleva adelante por transformarse en un país independiente de España.

 

 

USHUAIA.- El científico Jorge Rabassa, único argentino miembro de la Academia de Ciencias de Cataluña, aporta su mirada respecto del conflicto catalán, hoy en boca de todos debido a las gestiones que lleva adelante por transformarse en un país independiente de España.

Luego del referéndum independentista realizado semanas atrás en Cataluña (España), que culminó con 900 personas heridas a manos de la policía central, Radio Nacional Ushuaia dialogó con el exdirector del Cadic, quien se refirió a un “proceso muy complejo que tiene aristas tanto legales, constitucionales, políticas, económicas, sociales y sobre todo históricas que hacen que muchas veces se opine sin conocimiento de cuál es la situación y cómo se ha creado toda este enfrentamiento que ha ido creciendo entre Cataluña y el Gobierno de España”.

Rabassa, quien ha sido legislador y funcionario en distintos momentos de la política de Tierra del Fuego, expresó que “estoy muy preocupado por toda la situación, tengo lazos muy fuertes con Cataluña desde el punto de vista académico, pero además he sido profesor de la Universidad de Barcelona, hablo catalán, me considero tanto argentino como culturalmente catalán y esta situación me preocupa muchísimo porque uno piensa en los amigos, los colegas y mis parientes que viven allí y están sufriendo toda esta situación”.

El geólogo señaló que “hay que recordar una historia de Cataluña, que fue una Nación independiente en el siglo X, estamos hablando de mil años de identidad nacional con su propia bandera, su propia lengua que es una lengua latina como el español o el portugués y que durante todo ese largo milenio mantuvo por muchísimo tiempo una independencia o por lo menos una condición de equivalencia con España”.

Además recordó la vieja historia de Colón y sus viajes. “Fueron los reyes católicos los que le financiaron el viaje, eran la reina de Castilla y el reino de Aragón que era una denominación genérica de la Nación de Cataluña. En realidad el rey de Aragón no vivía en Zaragoza, vivía en Barcelona”, recordó.

“Esa situación se mantuvo con altibajos donde Cataluña mantuvo su independencia, tuvo guerras por algunos momentos y por otros se mantuvo aparte de las guerras internas de la corona española, pero el drama comienza en 1714, donde Felipe V, un Rey Borbón, entra a sangre y fuego en Barcelona, masacra a decenas de miles de soldados y prisioneros catalanes al ocupar la ciudad y destruye por mucho tiempo todas las instituciones autónomas de Cataluña, algunas de las cuales se habían creado 700 años atrás”, precisó.

Rabassa sostiene que a partir de ese momento es cuando comienza la brecha. “Esa brecha entre catalanes y españoles luego alcanza circunstancias muy difíciles cuando en plena república española, recuerden que la monarquía cayó en España en 1931, durante la república el gobierno catalán declaró la independencia, y eso no fue nunca perdonado por España a pesar de que estaba vigente una tremenda guerra civil que se inicia por un golpe militar encabezado por el general Franco”.

“Franco, admirador de Mussolini, de Hitler, que fue realmente quien llevó a una guerra civil que costó un millón de vidas, cuando existía una república legítimamente estructurada con su constitución, sus autoridades y su parlamento”, añadió.

El científico argentino expresó que eso claramente no se ha resuelto y los catalanes siguen soñando y reclamando su derecho a la independencia que les fue quitada en 1714. “Cuesta entender este enfrentamiento y esta actitud del gobierno central de España, en una Europa que yo sepa, el señor Rajoy no se rasgó las vestiduras cuando Eslovaquia se separó de la República Checa y esto fue hace diez años, no fue hace mil. O cuando Croacia declara su independencia unilateralmente de Yugoslavia, y eso representó una guerra pero los croatas ejercían su derecho a ser independientes”.

También repasó el caso de Escocia. “No hace mucho se votó en el Reino Unido por la independencia de Escocia y finalmente ese referéndum fue autorizado y permitido, combatido ideológicamente por el gobierno central inglés, pero no fue prohibido, y el resultado fue esa votación, no fue favorable a la independencia de Escocia por muy poco, pero se votó. Lo mismo sucede en Canadá donde hay un fuerte sentimiento de lo que es el Canadá francés de Quebec con respecto al Canadá anglófono, y los habitantes de Quebec han tenido ya dos o tres referéndum y hasta ahora nunca han obtenido la mayoría, pero el gobierno canadiense lo ha permitido en términos de lo que significa vivir en democracia y en libertad de elección”, agregó.

Sin embargo eso no ocurrió en España. “Acá los catalanes lo único que querían era votar, y eso que fuera en el inicio de un proceso de diálogo con el gobierno central. El problema es que Rajoy es anarquista, y por lo tanto es fascista, nazi simpatizante de Franco, de Mussolini y de Hitler, en su mentalidad no concibe ninguna posibilidad de acercamiento o de reconocimiento del derecho de Cataluña a expresarse por su independencia”, dijo Rabassa.

“Mandó a la Guardia Civil a invadir Cataluña, hirieron a 900 personas y ni siquiera pidió disculpas; él está convencido que tiene un mandato divino por sostener la monarquía y la integridad política de España, y no todos los españoles sienten lo mismo. De hecho lo que Cataluña reclama es su derecho a tener una República Catalana y no ser parte de un reino con una figurita totalmente decorativa, con un Borbón descendiente directo de Felipe V, el asesino de 1714”, opinó.

Sobre el futuro, el científico argentino señaló que “a partir de ahora creo que no va a pasar nada lamentablemente porque la actitud de Rajoy es absolutamente intransigente y que no puede aceptar ningún tipo de diálogo ni de mediación, y si es necesario va a mandar el ejército y bombardear Barcelona como lo hizo Franco en 1937”.

Incluso manifestó que “estoy convencido que puede suceder la intervención de Cataluña; sin lugar a dudas es una situación muy delicada, se vio también una manifestación en contra de la independencia durante este fin de semana, y eso es muy fácil de comprender por qué. Casi el 45% de la población de Cataluña hoy son en realidad inmigrantes de otras regiones de España que se morían de hambre en Andalucía o Extremadura, y que emigraban a Cataluña para conseguir trabajo y llevar adelante sus vidas ahí. Lo que uno conoce de esos inmigrantes es que pueden estar a favor de esa independencia, pero sus hijos no, entonces tenemos una terrible situación que recuerda tanto a la Guerra Civil que a mi no hace sino preocuparme muy profundamente”.