RÍO GRANDE.- Esteban es uno de los tantos fueguinos que se vieron afectados por las reprogramaciones de vuelos producto del paro aeronáutico de esta semana. En su caso tenía un vuelo para el 19 de diciembre que cancelaron y consiguió pasaje recién para el próximo 25; Aerolíneas solo les dio dos días de hotel y ahora solo les queda dormir en el Aeropuerto. Lenta normalización y miles de afectados.
“Con mucho sacrificio llevé a mi hija a Brasil de vacaciones y debíamos volver el 19 a Río Grande, me reprogramaron dos veces el vuelo porque supuestamente el paro iba a ser al mediodía pero ya a las cinco de la mañana comenzaron a cancelar vuelos, y cuando fui yo directamente no había vuelos”, contó ayer.
Además explicó que “en Aeroparque me dieron un voucher de cortesía según ellos de un hotel, que duraba lo que dura la reprogramación del vuelo que eran 48 horas, al volver a Aerolíneas a tomar el vuelo veo que nuevamente está cancelado, así que lo reprogramaron de vuelta y solo tenían fecha para el 25 de diciembre a lo cual reclamo que si no queda otra me quedo, reclamo el tema del voucher y me dicen que solo me pueden dar uno solo por vez y no me dieron otro”.
“Prácticamente me han dejado en situación de calle con mi hija de diez años, no se hacen cargo, estuve ayer haciendo filas y estuve más de seis horas esperando, y nadie me dio una respuesta. Aerolíneas te dice que ante el paro gremial ellos no tienen responsabilidad de poner hotel ni nada”, afirmó.
En este contexto explicó que “volví de vacaciones como todo el mundo sin un peso, y ahora estoy parando en la casa de un conocido por hoy nomás porque él mañana se va de vacaciones, así que prácticamente no sé qué hacer, voy a tener que ir con mi hija de diez años al aeropuerto y armar una carpa y quedarme ahí. Otra cosa no se me ocurre y no me dan solución, me sugirieron que me anote en una lista de espera y esperar lo mejor”.
“Hoy fui al aeropuerto a la madrugada y no había nada, me queda ahora ir a esperar a ver qué pasa y mientras tanto estoy gastando en colectivos y taxis”, lamentó.
Respecto de los días que le quedan en Buenos Aires donde además deberá pasar la Navidad dijo que “ahora estoy pensando en qué voy a hacer con la nena, voy a tener que endeudarme con la tarjeta de crédito y ver cómo hago para salir a flote hasta el 25 de diciembre que viajamos a la tarde supuestamente sino me lo reprograman para esta fecha”.
Finalmente manifestó que “cuando nos hicieron parar en el hotel estuve con mucha gente de Río Grande, una delegación de chicos que viajó a una competencia y les reprogramaron a la mayoría para hoy, a nadie de los que hablé le dieron la fecha tan lejos como a mí”.
“Se están lavando las manos con total impunidad, ahora no me queda otra que llegar a Río grande e iniciarles un proceso judicial”, cerró.