Ocurrió este lunes en la empresa Tecnomyl en Las Violetas, donde amaneció un exdelegado encadenado al portón de la firma. La empresa denunció en el ministerio de Trabajo que no cuenta con permisos gremiales de ningún tipo, y el operario reclama cobrar los días no trabajados. La firma no pudo operar por razones de seguridad.
RÍO GRANDE.- El exdelegado del sindicato de Químicos, de apellido Cabrera, apareció al inicio de la semana laboral, encadenado al portón principal de la planta Tecnomyl, que se ubica en el parque de la zona de Las Violeta, al norte de la ciudad.
Ante ello las operaciones fueron paralizadas, dado que por razones de seguridad no se podía trabajar con el transporte pesado por el portón ante el riesgo que significaba para este hombre, quien pedía la restitución del pago de días laborales descontados.
Lo increíble de la situación es que desde el cambio de conducción del sindicato, este exdelegado ya no reviste tal condición, según lo aducido por la empresa en un escrito que fue presentado ante el Ministerio de Trabajo de la provincia.
La firma aduce que Cabrera carece de permisos gremiales y de hecho no tiene como justificar las ausencias descontadas.
A pesar de ello este empleado mantuvo su protesta que hizo perder la actividad a la empresa y más de cien fuentes de empleo.