MADRID (AFP).- El Sevilla ganó en su campo 2-0 al Leganés en la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey, convirtiéndose ayer en el primer finalista del torneo del KO, a la espera del duelo del jueves entre Barcelona y Valencia.
El argentino Joaquín Correa abrió el marcador al rematar a gol un centro del colombiano Luis Muriel (15) y sobre la campana Franco Mudo Vázquez hizo el 2-0 al culminar una contra (89).
El Sevilla, que en la ida había empatado 1-1 en Leganés, alcanzó su novena final de Copa, tras un partido disputado, en el que el Leganés no pudo dar finalmente la sorpresa.
Presionando y recuperando balones ante un Sevilla dedicado a la contención, el Leganés se acercó con más peligro en los primeros minutos.
A los 10 minutos, el delantero holandés Nordin Amrabat soltó un disparo que se fue demasiado alto, pero entonces llegó el tanto local.
Muriel se fue por la derecha hasta la línea de fondo para meter un pase atrás, donde Correa cerca del área sólo tuvo que empujar el balón para hacer el 1-0 (15).
El gol trajo algunos momentos de desconcierto entre los jugadores pepineros, que aprovechó el Sevilla para dar un paso adelante.
Con Banega organizando el juego, los locales llegaron más obligando al defensa Tito a sacar dos balones sobre la línea.
Tras el descanso, el Leganés, sin nada que perder, salió al ataque en busca del gol que, al menos, empatara la eliminatoria, frente a un Sevilla que trataba de tocar y tranquilizar el juego.
Cuando parecía que el partido acabaría con el 1-0, Sandro Ramírez sorprendió a la contra y paso al Mudo Vázquez que superó a Champagne con un disparo por la escuadra para acabar de matar la eliminatoria (89).
Tras esta victoria, el Sevilla, que jugó en 2016 su última final de Copa perdiendo ante el Barcelona (2-0), esperará a su rival por el trofeo que saldrá del duelo de hoy entre el azulgrana y el Valencia.