BUENOS AIRES (NA).- El presidente de la Federación Argentina de Supermercados y Autoservicios (FASA), Víctor Parpaceli, advirtió que la restauración del IVA en los alimentos “impactará duramente” en el precio de los artículos de la canasta básica.
No obstante, Parpaceli reconoció que un sector supermercadista y de proveedores “aceptó el compromiso de dividir en partes la absorción del impuesto” y no trasladarlo a los precios, en una reunión con el Gobierno.
La FASA, que representa a las pequeñas cadenas de supermercados del interior del país, en su mayoría pymes, no participó de las discusiones con las autoridades.
El Gobierno acordó con los supermercados y proveedores para que absorban un 14% del 21% de la alícuota del IVA que se reimplanta y que solo el 7% restante sea trasladado a los precios.
“Veníamos advirtiendo que la culminación del decreto iba a impactar duramente sobre el precio final de los productos”, dijo Parpaceli.
El empresario supermercadista dijo que esperan que “en el acuerdo que se comenta estén todas las partes firmes para poder hacerlo y sostenerlo en el tiempo”, al opinar sobre lo que el Gobierno acordó con las grandes cadenas de comercialización.
Parpaceli, en declaraciones periodísticas, sostuvo que se necesita “una reactivación urgente del consumo” y que la Tarjeta Alimentaria, destinada a sectores sociales vulnerables para compra de alimentos, “será fundamental para romper con la recesión”.
“Es un gran desafío y lo estamos esperando todas las empresas”, afirmó.
El anterior gobierno había suspendido el IVA a los alimentos hasta fin de año para compensar el impacto que la devaluación tuvo en los precios de la canasta básica.
Control de precios
El Gobierno controlará en forma on line que los supermercados cumplan con el nuevo acuerdo de precios, que prevé aumentos de no más del 7% tras la eliminación de la exención del IVA en los alimentos.
Según fuentes de la secretaría de Comercio Interior, se utilizarán los controles on line y las inspecciones para evitar que los precios se disparen mas allá de lo acordado.
Las organizaciones de defensa del consumidor venían cuestionando al anterior gobierno por el desmantelamiento de la estructura de control, fundamentalmente por la falta de inspectores.
Los alimentos que integran la canasta básica deberán subir no más del 7% desde este jueves, según el acuerdo que el Gobierno suscribió con las grandes cadenas de supermercados.
Fuentes de la Secretaria de Comercio explicaron que los supermercados mandan los precios on line a ese organismo y que en el momento en el que cargan las listas de precios, se actualiza la base de datos.
Explicaron que funcionarios de esa secretaría pueden controlar inmediatamente las variaciones de precios que aplican las grandes cadenas desde el mismo momento en que las aplican.
Las fuentes destacaron “la buena predisposición” de las empresas que estuvieron trabajando hasta ayer para definir los precios, aunque enfatizaron que igualmente se va a estar controlando la variación de precios.