El titular de la entidad que nuclea a las fábricas electrónicas fueguinas aseguró que la reducción salarial en algunas empresas está justificada. Fuerte crítica del intendente Martín Pérez y pedido para que el Ministerio de Trabajo intervenga. En Ushuaia, sólo el grupo Newsan abonó el 100% de los haberes a sus operarios.
RIO GRANDE.- El presidente de la Asociación de Fábricas Argentinas Terminales de Electrónica (AFARTE), Federico Hellemeyer, confirmó que las fábricas de la provincia reducirán salarios al 70% tal como ya hizo FAPESA en Río Grande y, a su vez, pidió a los gremios que se sienten a negociar las condiciones del retorno a la actividad en el contexto extraordinario que planteó la cuarentena total por COVID-19.
De todas maneras, el titular de la cámara empresaria omitió informar que en Ushuaia el grupo Newsan efectivizó, el pasado viernes, el 100% de los haberes a sus operarios, que están en la misma condición, cumpliendo la cuarentena; pero demostrando así una actitud de responsabilidad empresaria en medio de la crisis.
Hellemeyer dijo que “el viernes circulamos un comunicado donde establecimos la realidad y se malinterpretó. Lamento que haya sucedido así, pero lo cierto es que venimos de muchos años muy mal, más allá de la situación que planteó el coronavirus” y precisó que “antes de la llegada de la pandemia, la situación de la industria electrónica era muy frágil y así nos encontró de cara a esta realidad que estamos viviendo”.
“Hay muchas empresas en Río Grande que hoy, que era el límite legal para el pago de haberes, están acreditando salarios al 70%. Ello es producto de la situación que estamos viviendo, desde el 16 de marzo estamos tratando de negociar con el sindicato alternativas para esta circunstancia, incluso antes de que se anuncien los aislamientos obligatorios”, precisó.
Por otra parte, aseveró que “nosotros le planteamos al sindicato en todo momento negociar alternativas porque tratándose de más de 20 días de industria parada y sin contar con ingresos, se iba a hacer insostenible el pago de salarios por la falta de caja”.
“Pedimos que los sindicatos dialoguen con nosotros, los canales están abiertos, pero no tuvimos respuesta. Necesitamos que los sindicatos se avengan a dialogar, que haya un entendimiento para lograr algún tipo de solución que combine alternativas para sobrellevar este trance”, reclamó.
En cuanto a la decisión de abonar solo una parte de los sueldos, el representante de AFARTE dijo que “los argumentos son muchos. Hicimos una presentación en el Ministerio de Trabajo de la Nación. Más allá de entrar en los detalles de los argumentos, es cierto que el año pasado firmamos un acuerdo con medidas extraordinarias, entre ellas la suspensión con el pago de salarios del 70%”.
“Lo que nosotros estamos haciendo, más allá del sustento legal, es tratar por todos los medios de sostener la industria. Entendemos que esto lo tenemos que superar juntos, con un esfuerzo de todos”, manifestó
Por ello, “volvemos a pedirle por favor al sindicato que se avenga a dialogar con nosotros, para poder llegar a un punto de acuerdo dada la situación que estamos viviendo hoy. Hemos formulado muchas propuestas, incluso dentro de la lógica de la negociación colectiva muchas veces la estrategia es plantear alternativas para negociar y frente a la intransigencia, pusimos sobre la mesa todas las alternativas”.
“No es posible creer que esta situación se pasa, se transcurre como si fuese una situación normal, porque no lo es. Las fábricas no producen, no tienen ingresos y los trabajadores están en sus casas. Por eso, es necesario paliativos para que las empresas puedan volver a ponerse en marcha y sostengan los puestos de trabajo”, cerró.
Fuerte crítica
El intendente Martín Pérez criticó la decisión de AFARTE de reducir salarios al 70% y a su vez, pidió “solidaridad” a la dirigencia empresarial en esta etapa que atraviesa la ciudad por la cuarentena total por COVID-19.
“Espero que el Ministerio de Trabajo actúe con celeridad y firmeza. No hay justificación para que las empresas descuenten salarios. Es un momento de hacer un esfuerzo, las empresas deben hacerlo”, enfatizó.
Asimismo, aclaró que “yo no voy en contra de una fábrica o de la otra. No me interesa, no pasa por ahí. Río Grande le ha dado mucho a las fábricas y por eso me parece que es el momento para que todos actuemos con responsabilidad”.
“Con el mismo criterio que ellos aplican, a nosotros que nos cayó la recaudación un 50%, deberíamos estar recortando servicios o salarios y no lo hacemos porque, en definitiva, el Estado somos todos”, aseveró.
Por ello, admitió que “estamos haciendo un gran esfuerzo desde todo punto de vista. Nos desvela mantener seguros a los vecinos y en eso estamos trabajando fuerte, para que los vecinos se sientan seguros en este período de tanta incertidumbre”.
“Encaramos un trabajo a conciencia, con todas las áreas del Municipio y en especial con el personal del área de Salud, que trabaja visitando a los vecinos, brindando asistencia inmediata a quienes así lo requieren”, aclaró.
REUNION EN TRABAJO
El gobernador Gustavo Melella solicitó al Ministerio de Trabajo y Empleo de la provincia convoque en carácter de urgente a una reunión entre la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) y AFARTE, con el fin de analizar la decisión de recortar salarios y empezar a proyectar un trabajo mancomunado para el futuro de la industria fueguina.
“Desde el Gobierno provincial llamamos al compromiso y la solidaridad del sector empresario privado. Debemos apoyar a los trabajadores que han acompañado el crecimiento de las empresas y que hoy ponen el hombro para que salgamos de esta crisis”, subrayó el mandatario fueguino.
Insistió que “nuestras puertas están abiertas al diálogo para que juntos trabajemos en encontrar soluciones y dar respuesta a los distintos escenarios que puedan presentarse. Es necesario ser solidarios en este momento, de apoyarnos entre todos, y evitar que la crisis económica perjudique aún más las economías de los hogares fueguinos”.
La postura de Melella se suma a las declaraciones que formuló el fin de semana, donde cuestionó el comunicado de AFARTE en el cual la entidad ya dejaba entrever la posibilidad de avanzar en recortes salariales.