El jefe de Gabinete de Ministros, Agustín Rossi, afirmó el miércoles en la Cámara de Diputados que “la Argentina hoy tiene elementos positivos de los cuales enorgullecerse y que sirven para mirar con energía el futuro”, destacó cifras positivas de la economía del país, que redondeó en 2022 su segundo año consecutivo de crecimiento, y aseveró que “el desafío que tiene la Argentina por delante es fortalecer la política para que pueda seguir pensando en el interés general y no sea subordinada al poder corporativo”.
BUENOS AIRES.- “La inversión extranjera directa en la Argentina estuvo arriba de los 15 mil millones de dólares el año pasado. Supera el máximo que existió entre 2015 y 2019, que tuvo un techo de 11 mil millones de dólares”, puntualizó Rossi en el inicio de la presentación del informe de gestión sobre la gestión del gobierno ante la Cámara de Diputados de la Nación, a los 27 días hábiles de haber asumido en el cargo, el 15 de febrero pasado, en cumplimiento a lo dispuesto por el artículo 101 de la Constitución Nacional.
El jefe de Gabinete valoró la baja de la desocupación hasta el 6,3% que registró la última medición, para el cuarto trimestre de 2022, y señaló el hecho de que “hoy es más fácil encontrar empleo en las provincias del interior” y agregó que “ese es un dato positivo a la hora de pensar el desarrollo de la Argentina y la igualdad de oportunidades”. Rossi aseguró además que “en los próximos días el presidente Alberto Fernández entregará la vivienda número 100.000 construida por este gobierno” y puso énfasis en el valor de la construcción para incidir en la baja de la desocupación.
Por otra parte, el ministro coordinador recordó que “el canciller argentino le notificó en estos días a su par británico que la Argentina da por terminado el ignominioso acuerdo Foradori-Duncan, algo que no tiene nada que ver con nuestras políticas históricas para defender la soberanía argentina sobre las Islas Malvinas”. Expresó al respecto: “Lo que tiene que hacer la Argentina es lo que hicimos durante muchísimos años, que es reclamar en cada uno de los foros internacionales nuestros derechos soberanos sobre Malvinas, con energía y con decisión”.
Rossi reivindicó también la política de derechos humanos del Gobierno y enfatizó al respecto: “Los derechos humanos no son un curro. En todo caso el curro es el de los que no quieren reconocer los 30 mil detenidos desaparecidos, porque no se animan a condenar el golpe de Estado del 24 de marzo de 1976. Lamentablemente, para un sector de la política argentina, cuando uno lee sus discursos no escucha la palabra dictadura. Para ellos no fue una dictadura, fue otro gobierno más”.
El jefe de Gabinete se refirió además al atentado contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, lo relacionó con “los discursos de odio” y mencionó que “han aparecido en la Argentina y en el mundo los cimientos de un extremismo de derecha o de ultraderecha”. Aseguró en ese sentido que “lo que sucedió con Cristina no es producto de la casualidad, porque para que haya existido alguien que le puso un revólver en la cabeza a Cristina, existió antes una campaña de discursos del odio”.
La Jefatura de Gabinete de Ministros de la Nación entregó más temprano ayer al cuerpo legislativo el informe número 135.