LONDRES (AFP).- El Arsenal debutó con derrota en el Emirates Stadium ante el West Ham (2-0), con un gol del argentino Mauro Zárate, ayer en la primera jornada de la Premier League.
Abrió el marcador el senegalés Cheikhou Kouyaté con un remate de cabeza en el minuto 43 y cerró la cuenta en la segunda mitad (57) Zárate, tras un robo de balón y una buena maniobra en las inmediaciones del área.
Vulnerable en defensa e ineficaz en ataque, este Arsenal distó mucho del que dominó al Chelsea hace una semana en la Community Shield.
“No fuimos convincentes ni en ataque ni en defensa. Los jugadores quizás estaban muy presionados. Era una buena oportunidad para responder”, señaló el técnico del Arsenal Arsene Wenger.
La derrota ante los Hammers confirma la mala costumbre de los Gunners de fallar en el inicio de las temporadas, con sólo una victoria en el partido inicial en las últimas cinco temporadas.
El equipo de Wenger dominó todos los apartados estadísticos (62% de posesión, 22 disparos y 6 dentro de los postes) pero nunca creó verdadero peligro.
En cambio el grupo dirigido por el croata Slaven Bilic estuvo certero. En el primer gol sirvió el francés Dimitri Payet y remató Kouyaté, mientras que en el segundo Zárate robó el balón a Alex Oxlade-Chamberlain y disparó cerca de un poste.
“Fue un gran comienzo para nosotros, no solo por los tres puntos contra un equipo que aspira al título”, dijo Bilic.
En ambos tantos el arquero checo Petr Cech, que debutó con el Arsenal en la Premier League, se mostró lejos de la espectacular versión que exhibió en una década con el Chelsea.