Autoridades del Gobierno provincial y de la Administración Federal de Impuestos (AFIP) conformaron una ‘mesa de trabajo conjunta’ con la premisa de “mejorar la competitividad de los productos” fabricados en Tierra del Fuego.
De acuerdo al Ejecutivo fueguino, las demoras del organismo federal para el levantamiento de garantías de exportación “ocasiona costos económicos que en la actualidad ascienden a 600 millones de dólares”.
RIO GRANDE.- A través de una gacetilla de prensa, el Gobierno provincial informó que la conformación de la mesa de trabajo “surge como parte del compromiso de los actores que intervienen en los procesos productivos”, por lo que “de esta manera se continúa trabajando con el objetivo de mejorar la competitividad de los productos, focalizando principalmente en la desburocratización de los procedimientos administrativos e incorporación de la tecnología para disminuir los tiempos y los costos económicos que las demoras implican a las empresas radicadas”.
“Por ello, el trabajo con la Aduana llevado adelante desde el Ministerio de Industria provincial inicia con la revisión en los procesos vinculados entre ambos organismos y el relevamiento de los procedimientos actuales, detectando las oportunidades de mejora y la normativa vinculada”, agrega la información.
Por parte de la Aduana-AFIP participaron del encuentro el Departamento de Supervisión Regional; la División de Desarrollos de Sistemas de Recaudación Aduanera; el Departamento de Técnica de Exportación; Departamento Técnica de Importación de la sección de Regímenes Especiales; la División de Procedimientos de Recaudación Aduanera y División de Análisis y Disposiciones de la Recaudación Aduanera.
Por parte del Ministerio de Industria estuvieron la Subsecretaría de Coordinación y la Dirección de Desarrollos Informáticos.
La planificación del trabajo conjunto está orientada a la gestión por resultados; por ello, el primero a obtener consiste en la disminución sustancial de los tiempos requeridos para el levantamiento de garantías de exportación, lo cual ocasiona costos económicos que en la actualidad ascienden a 600 millones de dólares.
Sobre la reunión, el ministro de Industria Ramiro Caballero sostuvo que “este tipo de actividades son consideradas por nosotros prioritarias, y tenemos la convicción de que todos mejoramos con el trabajo conjunto”.
“El futuro de nuestro país tiene industria fueguina y desde el inicio de la gestión, mejorar la competitividad siempre fue nuestra meta”, cerró.